Fernando Alonso cuenta con un evolucionado Ferrari F10 para lograr su segunda victoria en el Gran Premio de España, que se disputará este fin de semana en el circuito de Cataluña, al que se espera acudan sus seguidores de una forma masiva.
La principal modificación que presentará el bólido rojo del asturiano será la de contar con un motor mejorado, tras recibir la escudería italiana el visto bueno de la FIA para resolver los problemas de fiabilidad que había tenido en las primeras carreras de la temporada, en las que rompió dos de los tres motores utilizados.
Con la tranquilidad de que se han resuelto dichos imprevistos, los Ferrari, tanto el de Alonso como el de su compañero Felipe Massa, irán provistos, al menos en los entrenamientos libres de hoy de una versión operativa del denominado ‘conducto F’ que permite aumentar la velocidad punta en las rectas largas, anulando la resistencia del alerón.
La versión de dicho elemento fue probada la semana pasada por el piloto de pruebas, el italiano Giancarlo Fisichella en la pista de Vairano, y si da los resultados esperados se mantendrá durante todo el fin de semana.
Pero no solo Ferrari traerá importantes mejoras en sus monoplazas en esta primera prueba de la temporada europea, sino que sus principales rivales como Red Bull, que sigue siendo el favorito con el alemán Sebastian Vettel y el australiano Mark Webber, los McLaren de los británicos Jenson Button, actual líder del mundial y Lewis Hamilton y los Mercedes, que han aumentado la distancia entre ejes entre otras novedades para mejorar el coche de los alemanes Nico Rosberg y Michael Schumacher.
En casa
Además, el joven Jaime Alguersuari afronta su primer Gran Premio de España y, por primera vez desde su debut el pasado año en Hungría, lo va a hacer en una pista que conoce de memoria, por haber competido en ella en otras categorías y por haber rodado también en los entrenamientos el pasado invierno.
Con la tranquilidad de haber sumado su primer punto en Malasia, tras una espectacular carrera, y haber protagonizado otra gran actuación en China, afronta su prueba en casa con muchas posibilidades de volver a terminar entre los mejores.
Por su parte, Pedro Martínez de la Rosa (Sauber Ferrari) regresa a Montmeló tras su última participación en 2002 al volante de un Jaguar, y lo hace con la intención de firmar los primeros puntos que por problemas de motor se los impidieron lograr en Malasia y China.
Sauber cuenta con un nuevo director técnico en la persona del británico James Key, presentará algunas evoluciones y contará también con el ‘conducto F’. Entrar en los puntos está difícil, pero no imposible, si se tienen en cuenta los resultados que consiguió en las pruebas invernales.
Finalmente, Montmeló verá la presencia de la escudería Hispania Racing, que también quiere brillar en la medida de lo posible, amparado por las mejoras introducidas y por el hecho de que Bruno Senna y Karun Chandhock acabasen la carrera de Shanghai.
El trazado catalán se presenta exigente tanto para los monoplazas como para los propios pilotos, y habrá que prestar atención a la meteorología, sobre todo de cara a la sesión de clasificación, donde la lluvia, que ha estado cayendo durante toda la semana en Cataluña, podría jugar un papel clave.
