El alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, salió ayer al paso de los rumores sobre la instalación de radares fijos en los accesos a la ciudad y vías que soportan mayor densidad de tráfico, como la avenida Juan de Borbón, Padre Claret o la Cuesta de los Hoyos. Arahuetes desmintió durante una entrevista en Radio Segovia que la Concejalía de Tráfico ya haya procedido a la instalación de esos sistemas de seguridad y control, tal y como indicaban los mensajes que los segovianos recibieron a través en las redes sociales como Twitter y Facebook o mensajes de móvil y que corrieron como la pólvora.
La misma idea transmitió la concejala de Tráfico, Transportes y Policía Local, María José de Andrés, en declaraciones a La 8 de Segovia, “avisaremos cuando los nuevos radares se instalen”, insitió de Andrés, refiriéndose a la información que avanzó EL ADELANTADO el pasado miércoles.
Se trata de un radar fijo que controlará la velocidad de los vehículos en la capital, especialmente en las principales vías de acceso, donde diversos estudios de movilidad han detectado que los conductores sobrepasan con frecuencia los límites establecidos.
El proyecto de presupuestos de 2014 contempla una partida de 90.000 euros para la adquisición de una cámara de punto rojo, que velará por que los conductores respeten los semáforos y de este radar fijo pero de funcionamiento itinerante, que se unirá al que ya utiliza la Policía Local.