El tramo de la avenida Padre Claret comprendido entre la glorieta de Dionisio Duque y la intersección con la calle Soldado Español comienza a sufrir los efectos de la ‘maldición’ que esa transitada vía tiene desde que la construcción del aparcamiento subterráneo remodeló todo el entorno. Desde hace algunas semanas, los conductores y peatones pueden apreciar la aparición de baches -uno de ellos de considerables dimensiones- en la zona que hace poco más de un año fue reabierta al tráfico tras el asfaltado que reemplazó al adoquinado original. La climatología y el incesante paso de vehículos empeorarán a buen seguro el estado del firme en esa zona.
