La 32º edición de la «Paella» de la asociación Apadefim volvió a congregar a miembros, familias y simpatizantes de las personas con discapacidad intelectual. El acto se celebra como finalización del curso de esta asociación, que desde hace unos años se viene festejando en la explanada del Paseo del Hospital en San Ildefonso.
La comida comenzó a las 14.15 horas, aunque los asistentes disfrutaron de actividades de ocio antes y después de degustar la paella. Una disco móvil acompañó la fiesta. Durante el acto, se realizó un homenaje a las personas con discapacidad intelectual más mayores atendidas en los diferentes centros, en un reconocimiento de su esfuerzo y afán de superación. Tras otorgar los premios, las autoridades agradecieron a los asistentes y, sobre todo, a los cocineros su participación. El alcalde de La Granja, José Luis Vázquez, remarcó la importancia de este colectivo en el conjunto de la sociedad y sus aportaciones a ésta, pidiendo a la administración que «no se recorte un solo céntimo y siga facilitando su enriquecimiento como personas». La Gerente Territorial de Servicios Sociales, Pilar Sanz, centró su reconocimiento en las familias y los colaboradores, «animando seguir a la Asociación Apadefim en su trabajo y dedicación con las personas discapacitadas», apuntó.
La participación fue en esta edición algo menor con respecto a años anteriores. En la explanada del Paseo del Hospital se dieron cita unas 800 personas, mientras que en años precedentes la participación se acercó al millar.
Con este evento, Apadefim concluye su curso tras meses de actividad en un intento diario por mejorar la calidad de vida de sus integrantes. En este objetivo, Apadafim se ha integrado en la plataforma «Fundación Personas», junto a otras cinco asociaciones de Valladolid, Palencia, Zamora y León.
El presidente de la asociación, Hilario Miguelsanz, remarcó «la importancia de un festejo como éste y la ilusión que el acto transmite a los integrantes de los talleres». «El plan es repetir y espero que no acabe nunca», añadió el presidente. La fiesta a parte de suponer el final del curso, «también es un modo de reunir y reivindicar los derechos de estas personas, intentando contactar con las familias y las autoridades», afirmó Miguelsanz. El lugar de reunión es facilitado desde el Ayuntamiento de La Granja de San Ildefonso que eligió el emplazamiento por su buena comunicación y ubicación, situado al lado de parques y zonas verdes. La financiación para la realización de la actividad viene dada de manera muy importante por la Junta de Castilla y León, que sufraga hasta el 70% del coste de la actividad. A este respecto, Miguelsanz admitió que «implica un gran gasto pero merece la pena y es necesario». Para el desarrollo de esta jornada de convivencia la colaboración de los voluntarios, que participan de forma desinteresada, “es vital”, según el presidente. “Reciben ayudas cuantiosas que no se piden, los ofrecimientos son numerosos”.
Apadefim cierra a partir de ahora la mayoría de sus talleres pero aun se mantendrán las actividades para las personas con grandes necesidades de apoyo, que contarán con una oferta dedicada al ocio para el verano.
Marta Escudero, coordinadora de ocio, describe el acto como «un encuentro entre seguidores y usuarios a través de una festividad». Los talleres anuales dirigidos a acontecimientos lúdicos de este año han sido la risoterapia, senderismo, pandillas y cuentacuentos, a parte de al menos dos salidas al mes de excursiones y visitas.
Entre otras autoridades, acudieron a la paellada el Secretario Territorial de la Junta de Castilla y León, Pedro Ejarque; la Gerente Territorial de Servicios Sociales, Pilar Sanz y los alcaldes de Segovia, Pedro Arahuetes; de La Granja de San Ildefonso, José Luis Vázquez; de Palazuelos de Eresma, Domingo Asenjo de Vegas de Matute, Gregorio Allas y el de La Lastrilla, Vicente Calle.
