Durante un año, este grupo de hombres y mujeres laicos del arciprestazgo de Sepúlveda – Pedraza ha recibido formación para este servicio a la diócesis de Segovia. De esta forma, y con carácter de suplencia ante la imposibilidad de la presencia del presbítero, estos laicos se encargarán de convocar y reunir a la comunidad cristiana en el día del Señor y alimentarla con la Palabra de Dios y con el Cuerpo de Cristo reservado en el sagrario de la Iglesia parroquial.
La celebración de envío se llevó a cabo en la parroquia de Prádena en el marco de una Eucaristía presidida por Monseñor Ángel Rubio y concelebrada por los sacerdotes del arciprestazgo.
En la homilía el prelado recordó que la Eucaristía dominical es central en la vida del cristiano y de la Iglesia y que sólo la escasez de sacerdotes y la gran cantidad de núcleos pequeños justifica que se realice esta iniciativa, presente en varios arciprestazgos de la provincia desde hace casi 40 años. Además habló de una parábola del Concilio Vaticano, dando importancia a su misión como delegados. En ella resaltó el aspecto de la Mesa de la Palabra, muy unida al concepto de la Mesa Eucarística. Al finalizar la misa se entregó a los nueve animadores de Celebraciones en Espera de Presbítero una cruz, el directorio diocesano para realizar dichas celebraciones y el libro del obispo ‘Educar en la fe según el catecismo de la Iglesia Católica’.
