Este título es un subtítulo en la revista local “Segoviear”, que editan la Diputación Provincial a través de su Área de Promoción Provincial y Desarrollo Rural Sostenible, y Alimentos de Segovia, que sigue la “afición” actual de la mayor parte de las televisiones y alguna que otra emisora de radio de explicar, comentar, enseñar y demostrar la preparación de infinidad de “platos” que pueden dar lugar a ofertas en la gastronomía española. Apoya así a cuantas demostraciones se producen en muchos países, por lo que la Consejería de Economía y Hacienda, a través del Instituto para la Competividad Empresarial de Castilla y León (ICECyL) está promoviendo la presencia de 31 empresas de la Comunidad en dos Ferias asiáticas y una alemana, en sectores de alimentación y bebidas. En ambas han estado presentes las empresas segovianas Crujiente Y Dorado, S.L. y Bodegas “Blanco Nieva”.
Esta promoción es la que también, a escala provincial, se viene realizando con la mencionada revista “Segoviear”, que en sus páginas, impresas a todo color, en cada número ofrece amplios reportajes informativos sobre las industrias de la provincia, sin excluir ningún tipo de ellas, porque puede tratarse de restaurantes, bares, mesones y fábricas sobre las que se cuentan sus principales ofertas junto a breves datos de sus fundadores y propietarios, o bien si se trata de algunas de las numerosas empresas dedicadas a la fabricación de quesos, o las que comercializan huevos, o promocionan la carnicería tradicional, y también las de pastelería, sin olvidar, claro está, las numerosas panaderías y tahonas que producen variedades de pan artesano; por supuesto también los productos chacineros de todo tipo, etc., etc.
La publicación, respondiendo a su carácter periodístico, no olvida tampoco una sección siempre tan llamativa e interesante como es la entrevista. Y así, sucesivamente en los diferentes números aparecen conversaciones con fundadores y propietarios de establecimientos de todo tipo, sobre los que hay que señalar que son muchos los que distribuyen entre los pueblos de nuestra provincia, incluso los de escasa población, porque hay más de una localidad que teniendo en su nómina pocos vecinos, puede “pregonar” que en él hay una industria relevante de cualquiera especialidad.
Hay que destacar, entre esta producción provincial, la fabricación de cervezas artesanas, aventura en la que hace unos años se implicaron varios segovianos, y se ha conseguido un número importante de marcas que en los correspondientes establecimientos gastronómicos “lucen” su imagen en competencia con las más conocidas del espumoso producto.
Suele incorporar también la publicación alguna receta de las infinitas de que se puede echar mano, con el ánimo de que el ama de casa, o el hombre -porque ahora hay muchos que dominan bien la cocina, e incluso la pastelería-, incluyéndose los ingredientes de cada muestra y las adecuadas instrucciones para su elaboración.
El final no podía ser otro que la relación de puntos de venta de todos los muchos componentes de Productos de Alimentos de Segovia, a la vez que se invita a industriales y comerciantes a seguir asociándose a la marca.
La más reciente iniciativa la Diputación ha sido la presentación del Plan Impulso de Alimentos de Segovia 2024-2027, además de aprobar ayudas para cerca de un centenar se empresas adscritas a la marca que nos está sirviendo de referencia.
Un dato final de reciente publicación, que no es muy positivo y que afecta directamente al bolsillo de las familias, lo que se traduce que también llegará su efecto a los alimentos: “La factura fiscal para una familia tipo con rentas medianas oscila entre el 31% y el 35% de sus ingresos, según ha informado el Servicio de Estudios del Consejo General de Economistas de España”. Y como ejemplo se pone el de una pareja con dos hijos, con unas rentas mensuales de 3.639,75 euros, paga en impuestos 1.163,42 euros al mes. Por ello califican de “sangrante” la actual presión fiscal.
Y los listos que “mandan arriba”, sin preocuparse de los consejos y recomendaciones de entidades españolas y extranjeras solventes, y tan tranquilos y a defender sus “actividades sospechosas”.
