La victoria de la Gimnástica Segoviana, que supuso un espaldarazo a sus aspiraciones de acabar la temporada regular en la segunda plaza siempre que el Zamora no se despiste, quedó empañada en parte por la lesión de Álex Conde, que dio el susto mediado el segundo tiempo al retirarse del campo con una evidente cojera tras hacerse daño en la rodilla derecha después de intentar un remate a portería.
Aunque las primeras sensaciones del futbolista talaverano no auguraban nada bueno, poco a poco han ido mejorando los pronósticos, y a falta de la resonancia que se le practicará en breve, y que pondrá luz a la dolencia del jugador, se ha podido descartar casi de manera definitiva la rotura del ligamento cruzado anterior, y el diagnóstico que cobra fuerza es el del esguince de grado dos del ligamento lateral interno. Sin duda una lesión importante que puede suponer varias semanas de baja, pero que se aleja de los más de seis meses de ausencia de los terrenos de juego para Conde, que es lo que habría supuesto una rotura de cruzado.
Valorando el triunfo gimnástico en el contexto de la competición, la Segoviana continúa siendo el mejor equipo de 2020, año en el que aún no conoce la derrota, siendo de largo el conjunto más en forma del grupo, y su triunfo en La Nueva Balastera le sitúa como el equipo que más victorias ha logrado fuera de casa, con once triunfos en catorce partidos. Tanto es así que el equipo de Manu González ha sumado casi tantos puntos como visitante (33) que como local (34). El liderato de la liga queda a seis puntos, que son siete teniendo en cuenta que la Segoviana tiene el average perdido con el Zamora, pero la quinta plaza se sigue alejando jornada tras jornada, y ya queda a doce puntos.
