El grupo Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) condicionó ayer en un comunicado la «seguridad» de los dos rehenes españoles que mantiene secuestrados desde el pasado mes de noviembre a que se satisfagan sus exigencias.
El texto no especificaba cuáles eran las demandas, pero, al parecer, el grupo terrorista busca el pago de un rescate de cinco millones de dólares y la liberación de combatientes islamistas encarcelados como condición para liberar a los dos empresarios, según desveló ayer un diario de tirada nacional.
Además, junto al comunicado, AQMI ha difundido un vídeo en el que supuestamente aparecen los dos catalanes caminando por el desierto y rodeados por un grupo de hombres armados que los acompañan hasta un vehículo todoterreno en el que se suben los dos rehenes.
En la nota, que aparece dos días después de la liberación de la también cooperadora Alicia Gómez, que había sido secuestrada el pasado 29 de noviembre junto a Roque Pascual y Albert Vilalta, todavía cautivos, AQMI apremia al Ejecutivo de Madrid para que cumpla sus exigencias, que en ningún momento especifica.
«Decimos al Gobierno español que este paso positivo de los muyahidines exige de vosotros que os apremiéis en la satisfacción de nuestras exigencias legítimas como única condición para garantizar la seguridad de vuestros otros dos ciudadanos», indican los terroristas en el texto.
El mensaje, del que se hace eco el canal emiratí con capital saudí Al Arabiya, se insta también a la ciudadanía patria a «que aumente las presiones a sus mandatarios», a los que responsabiliza de la vida de los dos rehenes, para que satisfaga sus exigencias.
Asimismo, en el escrito, dirigido a la «opinión pública» y titulada Liberación de la española Alicia Gámez tras su conversión al Islam, se subraya que la puesta en libertad de la cooperante catalana se debió a su delicado estado de salud y a que cambió sus creencias a la religión musulmana.
«Teniendo en cuenta, en primer lugar, la conversión al islam de la rehén Alicia Gámez y, en segundo lugar, su estado de salud, los muyahidines decidieron liberarla el 10/3/2010», cita el comunicado.
Además, conforme al texto, la activista de Acció Solidària abandonó el cristianismo y tomó esta decisión «por su propio deseo y voluntad después de que los líderes religiosos de los radicales le ofrecieran clases de islam y de sharia (ley islámica)».
La nota agrega que Gámez, que ya se encuentra en Barcelona, tomó el nombre musulmán de Aixa después de su inicio en esta nueva creencia. Los terroristas ruegan también a Dios, que reafirme en Gámez la «religión verdadera» y que haga crecer el islam en su corazón.
El comunicado está acompañado de una fotografía en la que aparecen la cooperante liberada
-con la cara pixelada- junto a los otros dos españoles.
En la instantánea los rehenes están sentados en el suelo y a sus espaldas, de pie, se puede ver a tres personas con los rostros cubiertos y portando armas automáticas. En el fondo hay un cartel negro en el que solo se pueden leer algunas palabras, que parecen ser la profesión de fe del islam y el comienzo del nombre del grupo terrorista.
Los tres cooperantes de la ONG Barcelona Acció Solidària Alicia Gámez, Roque Pascual y Albert Vilalta fueron secuestrados el 29 de noviembre en Mauritania por Al Qaeda en el Magreb Islámico, cuando participaban en una caravana solidaria que se dirigía hacia Gambia y Senegal.
La mujer fue liberada el pasado día 10 sin que se hubiera pagado ningún rescate, según aseguró ese mismo día el ministro de Asuntos Exteriores español, Miguel Ángel Moratinos, y que ha confirmado posteriormente el Gobierno de Madrid.
