Al menos tres palestinos murieron ayer como consecuencia de los ataques aéreos de las Fuerzas de Defensa israelíes en la Franja de Gaza, en el tercer día de enfrentamientos desde el final del último alto el fuego temporal, según informaron fuentes médicas.
Los milicianos palestinos continuaron con el lanzamiento de cohetes y morteros desde el final del alto el fuego el pasado viernes, centrando sus ataques en los kibutz (granjas colectivas) situados junto a la frontera.
Los ataques bajaron en intensidad, con menos de 100 cohetes o proyectiles por día, y se dirigen también a zonas como la ciudad de Tel Aviv, que no había sido atacada desde que Israel retiró a las fuerzas desplegadas en Gaza en el marco de la operación Margen Protector.
Los ataques aéreos y los bombardeos israelíes acabaron ayer con la vida de tres palestinos, incluido un niño de unos catorce años de edad y una mujer, elevando el balance de las operaciones militares a 1.893 muertos desde el inicio de la ofensiva, el pasado 8 de julio. En este periodo, murieron en enfrentamientos 64 militares israelíes y tres civiles.
Los carros de combate y la Infantería israelí se retiraron de la Franja de Gaza el martes de la semana pasada después de que las Fuerzas de Defensa dieran por completada su misión de destruir los túneles utilizados por Hamás y las milicias palestinas para atacar el territorio israelí.
Desde que las Fuerzas Armadas israelíes retomaron sus operaciones el viernes, mataron a catorce palestinos en ataques aéreos. Los milicianos islamistas lanzaron más de 100 proyectiles, en su mayoría de corto alcance y proyectiles de mortero, todos con destino a territorio israelí, en muchos casos hacia Kibutz.
Israelíes contra Israel
Más de 150 israelíes se manifestaron en contra de los bombardeos del Ejército en la Franja de Gaza, desafiando con ello la prohibición policial impuesta en la ciudad por motivos de seguridad, que restringe las reuniones en lugares públicos.
La relativamente baja participación fue similar al número de personas que acudieron a la mayoría de las manifestaciones anteriores, que se realizaron de forma semanal desde que Israel iniciase su ofensiva contra los milicianos islamistas de Hamás en Gaza el 8 de julio.
Los manifestantes portaron pancartas en los que se leía ‘Detengan la masacre’ y ‘Liberen a Gaza’. Una de las asistentes, Halleli Pinson, explico que está en contra de los bombardeos en la Franja de Gaza. “Básicamente estamos pidiendo que se ponga fin al ciclo de la violencia aquí”.
Cerca de la zona decenas de israelíes realizaron una contraprotesta, aunque no hubo ningún enfrentamiento entre los dos grupos.
Las fuerzas de seguridad israelíes prohibieron con anterioridad la manifestación, haciendo referencia a las restricciones militares de reuniones públicas en las ciudades de la zona en conflicto. Sin embargo, ninguno de los asistentes fueron arrestados.
