Al menos 80 personas, muchas de ellas civiles, murieron en la ciudad portuaria de Adén en medio de la intensificación de los enfrentamientos entre los rebeldes chiíes huthis y los partidarios locales del presidente Abdo Rabbu Mansur Hadi, según informaron residentes y equipos de rescate.
Entre los muertos figuran al menos 40 civiles yemeníes que estaban intentando huir de los intensos combates en Adén durante la jornada de ayer cuando los combatientes huthis dispararon con su artillería contra su embarcación, según trabajadores de los servicios de rescate.
Según explicaron, las víctimas figuraban entre las alrededor de 50 personas que estaban a bordo de una embarcación que partía del distrito de Al Tawahi de la ciudad y se dirigía hacia aguas seguras en Al Buraiqa, en el oeste.
Residentes y combatientes locales indicaron que otras 40 personas, incluido un oficial del Ejército, murieron en los combates durante la noche en otras parte de Adén, incluidos unos 30 combatientes huthis y diez milicianos locales en este caso.
Según precisaron, los bombardeos aéreos de la coalición liderada por Arabia Saudí ayudaron a los combatientes locales a repeler la ofensiva huthi sobre Al Tawani, destruyendo tres tanques.
Entre los fallecidos durante la noche figura el general de Brigada Ali Nasser Hadi, según los residentes. El presidente Hadi designó, asimismo, al general de Brigada Saif al Baqri para tomarle el relevo.
Por otro lado, un total de 22 ONG advirtieron ayer del riesgo real de que la asistencia que están brindando a los afectados por el conflicto en Yemen tenga que suspenderse en el plazo de una semana a menos que las rutas terrestres, marítimas y aéreas se abran de inmediato para posibilitar la importación de combustible.
“Podríamos quedarnos sin combustible en cuestión de días”, subrayó el director de Acción contra el Hambre (ACH) en Yemen, Hajir Maalim. “Necesitamos contar con al menos tres vehículos para transportar personal médico y suministros a más de 1.600 niños con desnutrición severa en Hodeida, en el norte del país”, explicó en un comunicado conjunto.
“Si no podemos conseguir más combustible en 10 días, no podremos continuar con nuestras actividades y las vidas de estos niños estarán en peligro. Los niños no deben enfrentarse a la muerte a causa de la escasez de combustible. Es inaceptable”, defendió Maalim. Según recuerdan las ONG, 16 millones de yemeníes estaban en necesidad de asistencia humanitaria en este sentido.
