El atleta donostiarra Aitor Etxeberria, y la segoviana Sandra de Miguel se impusieron en la decimotercera edición de la Carrera Monumental Innoporc Ciudad de Segovia que se celebró en una soleada mañana de domingo, con 1.350 deportistas en la línea de salida.
Un gran ambiente saludó a los atletas desde primera hora de la jornada, con el sol en todo lo alto, sin apenas viento, y la organización poniéndolo todo a punto para que, a las 11 de la mañana, la cuenta atrás realizada por el alcalde de la ciudad, José Mazarías, diera la salida a la carrera, y paralelamente al inicio de la competición, diera también comienzo una masterclass de zumba que amenizó la media hora de espera hasta que comenzaron a llegar los corredores.
Como es la norma habitual en un recorrido que no está diseñado para hacer grandes marcas, sino para ‘vender’ Segovia como ciudad monumental que es, la salida de la carrera ‘engañó’ a los participantes con el descenso por el paseo Santo Domingo de Guzmán para posteriormente ascender por la Cuesta de los Hoyos y, llegados al Alcázar, afrontar un trazado verdaderamente exigente con muchos cambios de ritmo y pocos tramos de llano.
DIEGO TIRA, AITOR RESPONDE
Por delante, y prácticamente desde el inicio, los que apostaban por la victoria impusieron su ritmo para quitarse cuanto antes de problemas de ‘atasco’ de corredores. En la categoría masculina el duelo se planteó entre el vasco Etxeberria y el riazano Diego Pérez, ganador de la pasada edición y que llegaba de hacer una gran marca en la pasada Media Maratón de Sevilla. Tras ellos, un grupo de atletas con Mohamed Aloumat destacado, pero no lo suficiente como para poder competir por la victoria.
El ritmo que impuso el dúo de cabeza no fue demoledor, pero sí lo suficientemente rápido como para que con varios kilómetros de antelación estuviera claro que la victoria iba a estar entre ellos. Fue en la recta final cuando el atleta de San Sebastián consiguió unos metros de ventaja que fueron suficientes para imponerse en la meta con un crono de 32:30, con Pérez segundo a siete segundos, y Mohamed Aloumat entrando tercero a cuarenta. Tras él, y superados ya los 34 minutos de carrera, llegaron los ‘clásicos’ de las carreras en ruta que siempre ocupan posiciones destacadas como Miguel Ángel Martín Granados, Alberto Vigil o el incombustible Pedro Luis Gómez Moreno, que sigue teniendo en sus piernas la clase suficiente como para acabar una prueba de este nivel entre los diez mejores.
Exteberria: “El circuito es duro, pero espectacular. Vengo del 1.500 y del 3.000 y sé que tengo un buen sprint. Al final me he jugado esa baza para ganar”
Exteberria, que debutaba en esta Carrera Monumental, señaló en la meta que eligió seguir a Diego Pérez. “El circuito es duro, pero espectacular. Cuando he visto que Diego nos adelantaba, he pensado que en las cuestas iba fuerte, así que me he ido con él. Le he aguantado bien y en el último kilómetro me encontraba con fuerzas, tantas que cuando Diego me ha dicho que si entrábamos juntos le he dicho que yo venía a competir y a ganar. Vengo del 1.500 y del 3.000, así que sé que tengo un buen sprint y he jugado bien esa baza. Me ha encantado esta carrera, el recorrido y el ambiente, y si me encuentro bien, repetiré con seguridad el próximo año”.
SANDRA DOMINA CON CLARIDAD
En la categoría femenina fue la segoviana Sandra de Miguel quien, buena conocedora del recorrido, controló la carrera con un ritmo sostenido que le llevó a imponerse en la meta bajando de largo de los 40 minutos, y con tiempo suficiente para celebrar el triunfo. Rebeca Merlo se hizo con la segunda plaza, y la ganadora del pasado año, Blanca Muñoz de Pablos, entrando como tercera en dura competencia con Lucía Lozano, que terminó en la cuarta plaza.
San Miguel afirmó al micrófono de Luis Cuesta (incombustible animando en la línea de meta) que la prueba le resultó “muy divertida y animada”, y que la presencia de las bicicletas acompañando a los tres primeros clasificados de cada categoría “nos han ayudado a mantener el ritmo” en un trazado con muchos desniveles, “y yo no sé qué es lo que me gusta menos, si las subidas o las bajadas”.
San Miguel: “Se ha hecho duro, pero la presencia de las bicicletas nos ha ayudado a mantener el ritmo. La carrera ha sido muy divertida y animada”
Durante más de cuarenta y cinco minutos después de la llegada de ganador los atletas fueron cruzando la línea de meta, hasta llegar a 1.126, una buena cifra teniendo en cuenta que el recorrido, pese a ser de ‘sólo’ diez kilómetros, no es apto para todos los públicos. La prueba que nació hace trece ediciones como preparación para la Media Maratón Ciudad de Segovia ha ido adquiriendo identidad propia, porque tiene toda la espectacularidad del paso al pie de los monumentos más representativos de la ciudad, pero su nivel de exigencia (siendo evidentemente alto) es menor que el de una media maratón.
