Madrileño de nacimiento, Rafael Casado se considera “un 50% de Valverde del Majano —de donde era su madre— y un 50% de Garcillán —pueblo natal de su padre—”. Tras casi tres décadas ejerciendo como director de banco, en numerosos destinos nacionales (Madrid, Barcelona, Valencia, Guadalajara, Valladolid y Segovia), hace cinco años se prejubiló. Desde 2003 preside el Ayuntamiento de Valverde, cuya corporación, dice, tiene “perfectamente repartidas las responsabilidades”. Él se ocupa, de acuerdo con sus palabras, de “crear y vender suelo industrial”. Esa misma tarea deberá asumir a partir de ahora, en la Diputación, donde dirigirá “Promoción Económica”, un servicio de amplísimas competencias que busca la meta más ambiciosa: el desarrollo de 209 pueblos.
El presidente de la Diputación, Francisco Vázquez, ha encomendado a Rafael Casado una de las áreas ‘clave’ en el nuevo organigrama de la institución, ‘Promoción Económica’, cuya principal tarea es, ni más ni menos, “el desarrollo de la provincia, en todas sus vertientes”, una tarea que, aunque se presenta ardua, “debe dar frutos” en esta legislatura, según pronostica su responsable.
Como delegado del Plan Estratégico Provincial [incluido en ‘Promoción Económica’], Casado espera que la legislatura que acaba de comenzar resulte “más fructífera” que la anterior. Ahora, cuando el número de localidades que proyectan construir un polígono industrial no hace sino crecer, él asegura que “es el peor momento para vender pero el mejor para hacer”. En su opinión, la provincia “debe preparar suelo industrial para que cuando acabe la crisis esté en primer línea”. En ese sentido, anuncia que “en breve” volverá a retomar su trabajo la comisión que decidirá cuáles son los mejores emplazamientos para áreas industriales. “Creo —afirma— que en los próximos cuatro años tiene que salir adelante más de un polígono en la provincia”. Aunque, de inicio, da prioridad a los grandes desarrollos de suelo industrial, no quiere descartar otros, de menor tamaño. “En la Diputación estamos para orientar a todos, aunque su proyecto sea pequeño”, se ofrece.
En cualquier caso, Casado quiere advertir que el servicio de Promoción Económica no se ceñirá al Plan Estratégico. Se encargará, entre otros asuntos, también de la promoción de las ferias agropecuarias y de ‘Alimentos de Segovia’, una marca que desea potenciar. Así, cuando llegue septiembre, Casado quiere convocar a todas las empresas incluidas en ‘Alimentos de Segovia’ para elaborar una hoja de ruta para los próximos cuatro años, en la que figuren las actuaciones a realizar tendentes, por una parte, a que los segovianos conozcan su producción agroalimentaria y, por otra, a lograr un hueco en el mercado nacional.
El área de Informática y Nuevas Tecnologías también será responsabilidad de Casado. De esa parcela, él desea que ayude “a hacer más sencilla la vida a los ciudadanos de la provincia”, de forma que facilite la realización de trámites a través de Internet. “Quiero que ‘Informática…’ se convierta en el departamento puntero de esta casa”, señala.
A mayores, el servicio de Promoción Económica incluye ‘Programas Europeos’ y lo relativo a Medio Ambiente, a excepción de los residuos.
“Me gustaría hacer muchísimas cosas en todas las áreas, pero no se trata tanto de lo que a mí me gustaría, sino de lo que realmente podamos emprender”, señala, en un ejercicio de realismo que quiere dar continuidad con un deseo, el de que tras las elecciones del 20-N “las cosas empiecen a cambiar”.
