Desde la Junta apuestan por la acuicultura porque Castilla y León “es líder en este sector” y lo es tanto en producción y cría de peces y moluscos, como en la producción de alimentación para animales, con más de 114 mil toneladas anuales a través de distintas empresas, algunas de ellas radicadas en la provincia de Segovia, como es el caso de Dibaq, ubicada desde hace más de cincuenta años en el municipio de Fuentepelayo.
Datos de liderazgo que ponía de relieve la consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, María González Corral, en su visita esta mañana al Centro de Investigación en Acuicultura de Segovia, dependiente de ITACyL, donde también expuso las ayudas que ofrece la Junta de apoyo a la producción y transformación de productos, valoradas en 11 millones de euros, que forman parte del Plan Estratégico de la Industria Agroalimentaria2024-28, dirigidos a sufragar entre un 50% y un 60% los proyectos dirigidos a modernizar los centro de trabajo y mejorar la calidad y el valor añadido de los productos.
Ayudas a las que se puede concurrir hasta el próximo 30 de abril, enmarcadas dentro del Fondo Europeo Marítimo de Pesca y Acuicultura (FEMPA) y que van en dos líneas diferenciadas; la primera, dotada con 3,9 millones de euros, está destinada a inversiones en producción acuícola, optimización de procesos, eficiencia en el uso de recursos naturales y mejora de infraestructuras, “para que se puedan automatizar y digitalizar los procesos e incrementar la producción”. La subvención en este caso, cubre hasta el 50% del presupuesto para grandes empresas y el 60% para pymes.
La segunda línea de ayudas, dotada con 7,1 millones de euros, apoya la transformación de productos de pesca y acuicultura. Se priorizan inversiones en economía circular, producción ecológica, mejora de procesos, sistemas de gestión, conservación o comercialización, seguridad de los empleados y adaptación a normativas europeas, entre otros aspectos. En este caso las pequeñas y medianas empresas podrán recibir hasta el 50% de la inversión.
La consejera, acompañada por el alcalde de Segovia, José Mazarías, y la vicepresidenta segunda de la Diputación, Magdalena Rodríguez, visitó las instalaciones de mano de la responsable del centro, Ana María Larrán, quien les explicó el funcionamiento y los proyectos de investigación que se están desarrollando en este momento.
Líderes
Según señaló González Corral, la Comunidad lidera la producción acuícola de interior en España, con 28 establecimientos de cultivo, 14 de ellos granjas de trucha arco iris que producen 4.000 toneladas, representando el 24,5% de la producción española, lo que la sitúa en primer lugar en producción de peces de agua dulce. Además, alberga la única producción acuícola de crustáceos de España, en Valladolid, donde el langostino se cría en ciclo cerrado de producción. Un sector que además genera 224 empleos directos, según apuntó la consejera.
Asimismo, la Comunidad es líder en alimentación para acuicultura con empresas ubicadas en Castilla y León como Biomar en Palencia, Skretting en Burgos, o la ya mencionada Dibaq en Segovia. “Estas empresas producen 114.000 toneladas de alimento y suministran casi toda la comida a las granjas acuícolas del país, complementándose con importaciones de Francia y Portugal”, remarcó González Corral.
El gobierno autonómico apuesta firmemente por este sector, el de la acuicultura, porque además de generar empleo, riqueza, ayuda a fijar población y es una forma de consolidar esa seguridad alimentaria en esos procesos de producción sostenible.

Investigación y desarrollo
El Centro de Investigación en Acuicultura, ubicado en Zamarramala (Segovia) forma parte de la red de centros tecnológicos especializados del ITACYL, dependiente de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural. El objetivo del centro es el desarrollo de actividades de investigación y desarrollo tecnológico para la mejora de la competitividad del sector de la acuicultura en la región, a través de servicios de I+D, proyectos de investigación aplicada y actividades formativas especializas.
El Centro cuenta con instalaciones de cría para especies acuícolas en circuito cerrado (Sistema de Recirculación de Agua). Dispone de un total de 7 salas, con 10 tanques de 500 L cada una, con la singularidad de que son totalmente independientes unas de otras, dotando al sistema de versatilidad, con la posibilidad de trabajar de forma simultánea en diferentes salas, tanto con especies de agua dulce como con especies de agua salada, o con diferentes condiciones de cultivo según la especie en estudio. Cada sala tiene un conjunto de filtros mecánicos y biológicos, lámpara UVA y sondas que miden de forma continua los principales parámetros de calidad del agua (temperatura, oxígeno disuelto, caudal, pH y potencial redox). Además, durante los últimos tres años el Centro ha puesto en funcionamiento nuevos sistemas para poder criar peces en diferentes estadios de crecimiento, además de 18 acuarios con diversos usos.
Una inversión que roza los 200.000 euros para el desarrollo de proyectos innovadores
Actualmente el Centro de Acuicultura de Segovia tiene en marcha 5 estudios y servicios de I+D con empresas del sector y universidades

El Centro de Investigación en Acuicultura del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León desarrolla en la actualidad cinco proyectos, con una inversión autonómica de 187.451 euros. Algunas de las líneas en las que trabajan son la reproducción de los peces, como mejorar su alimentación y como suministrarles vacunas orales. De todos ellos habló la responsable del Centro, Ana María Larrán, durante la visita de la consejera.
El primero de los proyectos les une a Skreting, una empresa del grupo Nutrico, que tiene una potente línea de piensos y para el que están llevando a cabo un estudio nutricional, desde noviembre del año pasado y hasta finales de marzo de 2026, sobre la inclusión de ingredientes experimentales en dietas extrusionadas para trucha “sobre todo trabajamos en ingredientes funcionales para piensos y como estos pueden mejorar la inmunidad de los peces”. Para ello cuentan con un presupuesto de 30.378 euros.
En otro de los proyectos trabajan con el Serida, organismo de investigación del Principado de Asturias, en un ensayo de alimentación de peces con borra de fermentación de sidras. “Vamos a trabajar con este residuo ya que los investigadores del Serida han visto que son ricos en polifenoles y en fibra para ver cómo podemos mejorar las propiedades de esos piensos”. Este proyecto que se alargará hasta junio de este año y cuenta con una partida de 31.810 euros.
En el tercer de los proyectos, según apunta Larrán, trabajan otro año más, y ya van siete, con Hipra, una empresa de sanidad animal, en el desarrollo de pruebas para estudiar la seguridad y la eficacia de vacunas para salmones. A este respecto Larrán conmentaba que “gracias a nuestros ensayos, han podido registrar en la Agencia del Medicamento, una vacuna para salmones frente a una enfermedad muy común de los peces, la yersiniosis”. Un estudio que acumula una inversión de 87.872 euros y que se prolongará hasta finales del año que viene.
Los dos últimos proyectos, concluidos a principios de este año, están estrechamente ligados a universidades como la Complutense de Madrid y la Miguel Hernández de Elche. Con la primera trabajaron la eficiencia alimentaria en truchas bajo diferentes escenarios de iluminación, temperaturas y estrategias de alimentación, con un presupuesto de 21.998 euros. Las vacunas, nuevos formatos de estas y nuevas formas de administración centraron el estudio con la universidad alicantina con un presupuesto de 15.390 euros.
Formación
Además de los proyectos de investigación y ensayo el Centro de Acuicultura de Segovia sigue apostando por la actividad formativa, colaborando con el Centro de Formación Agraria en formación básica en acuicultura. Así lo destacó en su intervención ante los medios la responsable del centro :“El año pasado hemos impartido un curso sobre nutrición y gestión de la producción y este año, en mayo, vamos a dar un curso en nuestras instalaciones con una parte importante práctica y sobre todo, va a basar sobre patología en agricultura continental”.
