El sarro es un enemigo cotidiano de la dentadura que nos acompaña casi toda la vida, y que cada cierto tiempo nos obliga a ir al dentista para hacer una limpieza dental. Es un gasto que podemos disminuir con buenas prácticas de higiene dental y con algunos trucos caseros que antes nos transmitían nuestras abuelas, y ahora lo hacen influencers a través de las redes sociales.
Cepillarse los dientes de forma correcta y varias veces al día es fundamental para mantener sanos los dientes y prevenir la formación de sarro. En la práctica, el sarro eventualmente logra ocupar posiciones en los dientes, y obliga a tomar otras medidas, que pueden terminar en la silla de un odontólogo, aunque no está de más probar con los trucos caseros.
Hablemos del sarro
Es una capa producto de la actividad bacteriana en la cavidad bucal, que cubre los dientes y puede darle una coloración marrón o amarillenta. Además del perjuicio estético, el sarro puede causar otros problemas más desagradables o serios: mal aliento, destrucción del esmalte, caries, aparición de sensibilidad dental, pérdida de piezas dentales y hasta enfermar las encías.
Bicarbonato y sal: un truco sencillo para eliminar el sarro
Uno de los remedios caseros más recomendados para este problema tan frecuente incluye el uso de bicarbonato y sal, y es bastante sencillo. Debemos preparar una pasta combinando bicarbonato y sal, luego mojar el cepillo dental en agua tibia, pasarlo por la pasta y proceder al cepillado de los dientes. A esta mezcla algunos sugieren agregar zumo de limón, que además puede actuar como un blanqueador natural, dejando los dientes brillantes.
Estos trucos caseros, y otros que incorporan a la mezcla vinagre, pueden encontrarse en portales digitales dedicados a la salud, que hacen un repaso por algunas de estas prácticas y también incluyen la opinión de profesionales de la salud.
Qué dicen los profesionales
Muchos odontólogos desaconsejan esta práctica por considerar que se trata de ingredientes abrasivos, que más allá de eliminar el sarro lo que pueden estar haciendo es causar daños en el esmalte que protege los dientes. Dentistas y otros profesionales de la salud consideran que estos trucos pueden funcionar parcialmente, pero que el sarro solo puede ser combatido de forma efectiva en los consultorios y utilizando los equipos adecuados.
Es la opinión de la odontóloga Michelle Pawly: “Una vez que la placa bacteriana se endurece y se transforma en sarro no es posible eliminarla con productos y alimentos en casa”. Y agrega que retirar el sarro “solo puede hacerse en el dentista mediante una limpieza dental profesional”. Para fracturar la capa del sarro y hacer que se desprenda de los dientes, los odontólogos utilizan “instrumentos especializados, como aparatos sónicos y ultrasónicos, que generan ondas vibratorias capaces de romper y desprender el sarro de los dientes”.
Por eso, más allá de los trucos caseros y de los buenos hábitos de higiene dental, siempre es aconsejable ver a un odontólogo una o dos veces al año, para hacerse una revisión y una limpieza dental, de ser necesaria.
¿Podemos prevenir la aparición del sarro?
Podemos evitar en parte su aparición cepillándonos regularmente, sobre todo después de comer, y utilizando el hilo dental para eliminar los restos de comida que quedan entre los dientes. También es aconsejable llevar una dieta balanceada, reduciendo en lo posible el consumo de azúcar y carbohidratos, que contribuyen a la formación del sarro; y evitar vicios como el tabaco, que también favorece la formación de la placa bacteriana. Y no olvidar hacerse una revisión con el odontólogo al menos una vez al año. La limpieza bucal es síntoma de buena salud.