En el siglo XV, la Puerta del Sol era parte de la muralla que rodeaba la ciudad, y seguramente entonces había más sombra alrededor de la Puerta que la que podemos encontrar actualmente, si es que queda alguna. Sobre todo ahora que están más cerca los soleados días del verano, que tan intenso es en España.
No es un secreto que el espacio alrededor de la Puerta del Sol es francamente hostil durante los largos días veraniegos, por la ausencia de lugares donde resguardarse del sol. Aunque este año la situación no será la misma, gracias a una iniciativa de la alcaldía que transformará este espacio de una manera que sorprenderá a madrileños y visitantes.
La transformación de la Puerta del Sol
Durante años se han escuchado quejas sobre la falta de lugares para protegerse del sol y el calor en este amplio y popular espacio madrileño, y es por eso que el Ayuntamiento de Madrid ha dado todos los pasos necesarios para crear un novedoso lugar donde madrileños y turistas puedan resguardarse del sol.
El proyecto consiste en instalar un espacio de toldos y lonas temporales, que estarán desde junio hasta octubre de este año, para que los transeúntes puedan descansar y escapar al menos a la radiación y al calor. Son temperaturas que superan fácilmente los 30 °C en el centro tradicional de la ciudad, y cuyo efecto parece multiplicarse por el asfalto y el cemento urbano.
Algunos obstáculos por superar
Parece una idea sencilla, y habrá quien se pregunte por qué no se había puesto en marcha antes. Porque no es tan fácil hacer cambios en un espacio que es parte fundamental del patrimonio histórico de la ciudad y del país.
Además de encontrarse la placa del Kilómetro Cero, y la emblemática estatua del Oso y el madroño, alrededor de la Puerta del Sol hay varios edificios que también son parte del patrimonio nacional y que no pueden ser afectados, estéticamente hablando, por nuevas instalaciones en espacios abiertos.
Es por ello que la instalación de un sistema de toldos debe contar con el aval de la Comisión Local de Patrimonio Histórico, que hasta ahora parece dispuesta a no poner obstáculos a esta iniciativa. Un cambio que beneficiará a visitantes y a los madrileños que no puedan irse de vacaciones y escapar de las olas de calor que impactan la ciudad durante el verano.
Cuándo se instalarán los toldos en la Puerta del Sol
El proyecto de la Puerta del Sol será llevado adelante por el estudio Linzazoro-Sánchez, y se supone que los toldos se instalarán durante la primera quincena de junio, es decir, un poco antes de comenzar oficialmente la estación veraniega.
Los toldos irán sujetos a mástiles de acero, que actuarán como anclajes para las telas y los tensores, y cubrirán los bancos de granito que se encuentran al norte de la plaza, convirtiéndose así en un espacio para protegerse del sol y el calor, y también en un sitio para descansar y recuperarse.
Se trata de una estructura desmontable, que se retirará en octubre, ya comenzado el otoño, y podrá utilizarse el próximo año. Es un sistema evaluado por expertos, y que deberá resistir corrientes violentas de aire y otros fenómenos meteorológicos que puedan presentarse.
Otros proyectos
El sol y el calor en la Puerta del Sol han sido objeto de debate desde hace varios años, y en algún momento llegó a hablarse hasta de la posibilidad de sembrar árboles para hacer descender las altas temperaturas y crear un espacio más amable.
Este proyecto fue considerado inviable por dos razones, principalmente: la dureza del suelo y toda la red de servicios que podría verse afectada, y que la estética de este espacio tan cargado de historia se vería severamente afectada.