El 21 de abril de 2025 quedará marcado en la memoria de millones de católicos y de seguidores del cristianismo como el día en que abandonó este mundo material el primer pontífice del Nuevo Mundo, y también el primer jesuita en ser coronado como cabeza de la iglesia de Roma.
El papa Francisco fue una figura polémica dentro y fuera de la iglesia, donde dejó muchos fieles, pero también muchos sacerdotes y feligreses que cuestionaban sus ideas más innovadoras y, a veces, aparentemente ajenas al temario habitual del Vaticano. Este es el caso de los problemas ambientales.
Un Papa preocupado por la ecología y por el futuro de la Tierra
Prueba de su preocupación por el creciente deterioro del planeta debido a la actividad humana, fue su encíclica “Laudatu si”, “Alabado seas”, en español, publicada en mayo de 2015, hace casi 10 años, y cuando apenas tenía dos años ejerciendo el papado.
En este documento, que ya es histórico, el papa Francisco se inspira en el cántico de las criaturas de san Francisco de Asís para hacer énfasis en la necesidad de cambiar nuestra conducta respecto a la naturaleza, y asumir como parte de nuestras responsabilidades la protección del medio ambiente.
Como parte de su compromiso con el contenido de esta encíclica, el Papa quería dar el ejemplo «descarbonizando» el Vaticano, y se había propuesto reemplazar todas las unidades por vehículos 100% eléctricos antes de 2030, comenzando por el papamóvil.
Un papamóvil 100% eléctrico
El papa Francisco encargó a Mercedes Benz la construcción de un papamóvil 100% eléctrico. No fue una elección arbitraria, pues Mercedes Benz es proveedor oficial de vehículos del Vaticano desde 1930, y desde hace 45 años los papas se han movilizado en papamóviles basados en la clase G de Mercedes Benz.
El Papa pensaba utilizar el nuevo papamóvil durante el Jubileo de 2025, una celebración que se realiza cada 25 años y que atrae a millones de fieles a Roma. Ahora quedará como el vehículo del nuevo papa.
En todo caso, el papa Francisco tuvo ocasión de verlo. El papamóvil, con un sistema de propulsión especialmente adaptado para las bajas velocidades con las que normalmente se conduce, fue presentado por el CEO de Mercedes, Olla Källenius, con estas palabras:
“Este papamóvil refleja nuestra visión de un futuro neutro en carbono, combinando innovación y sostenibilidad en cada detalle”.
Un papamóvil hecho a mano
El nuevo vehículo, 100% eléctrico, fue donado al Vaticano en diciembre de 2024, en un acto en el que el papa Francisco solicitó que estuvieran presentes todos los trabajadores que participaron en su construcción.
Aunque se trata de un modelo modificado de un clase G eléctrico, se hicieron una serie de modificaciones para adaptarlo a su misión papal, algunas de las cuales fueron solicitadas directamente por el Papa.
Entre ellas, la posibilidad de graduar la altura del asiento donde va el sumo pontífice, y que este pudiera girar hacia ambos lados, para facilitar la visión y el saludo a los fieles.
La carrocería se hizo a mano, de forma artesanal, y la puerta izquierda trasera fue rediseñada por completo. El papamóvil es abierto, pero posee un techo retráctil, que se puede colocar rápidamente si cambian las condiciones del tiempo.
Los otros coches eléctricos del papa Francisco
Aunque este sería el primer papamóvil completamente eléctrico de Mercedes Benz, el Papa también utilizó un papamóvil que utilizaba hidrógeno, basado en el modelo Mirai de Toyota, y también usó otros coches eléctricos, como el Opel Ampera-e y un Nissan LEAF, entre otros.
Esperemos que las preocupaciones medioambientales del papa Francisco formen parte de la herencia y de los objetivos del nuevo papa.
