En España, la vigilancia y control de las carreteras está a cargo de la Dirección General de Tráfico (DGT), por lo que es de pensar que la instalación de radares y dispositivos para la monitorización de las vías está solo bajo su mando. No obstante, en Cataluña han llegado 2 nuevos controladores de velocidad que han causado revuelo.
El Servei Català de Trànsit (SCT) cuenta con uno de los controladores aéreos más novedosos. Falcó es un helicóptero imperceptible para los detectores o inhibidores de radar, ya que no emite ningún tipo de onda o rayo láser con el que pueda ser identificado. Se le considera uno de los equipos más nuevos del mercado; para complementar el equipo de vigilancia, se han agregado los nuevos “carros radares”.
Cataluña es pionera en implementar estos nuevos cinemómetros portables altamente eficientes, capaces de transportarse fácilmente por las carreteras camuflados como coches para reforzar la vigilancia del tráfico y detectar los vehículos que circulan con exceso de velocidad.
Carros radares sancionan a más del 20% de los conductores
En solo 3 días, 65.120 vehículos en total fueron vigilados por los carros radares, de los cuales 9.980 serán sancionados por exceso de velocidad. Estos controladores de carreteras han realizado 9.980 sanciones, es decir, más de 3.000 multas diarias, datos cotejados por Motorpasión. Las carreteras C31 en Bellvitge y AP-7 en Santa Perpetua de la Mogoda fueron las seleccionadas por el SCT para desplegar estos nuevos cinemómetros, y los resultados han sido alucinantes.
Estos equipos han detectado que entre el 17% y 23% de los turistas que circulaban por las carreteras excedían los 80 y 100 km/h, límites de velocidad establecidos para la C-31 y la AP-7, respectivamente. Así mismo, los vehículos de transporte pesado también han sido sancionados alcanzando el 3%.
El diario catalán, El periódico, señala que la SCT dispone de dos dispositivos más, por lo que en total se cuentan con cuatro carros radares. Estos equipos se moverán por todas las carreteras de la zona. Actualmente han sido activados solo dos, lo que forma parte de la primera fase de este gran proyecto, ya que para el año 2026 el SCT espera contar con 26 controladores en servicio por las carreteras de Cataluña.
El director del SCT, Ramón Lamiel, declara para El Periódico que el siguiente paso es informar de mejor manera a los conductores donde estarán ubicados los carros radares para que estén sobre aviso y disminuyan la velocidad para evitar multas.
Eficacia comprobada
Una de las principales ventajas de estos dispositivos es su autonomía y movilidad, ya que no necesitan estar conectados a la electricidad para funcionar. Lo más innovador es que pueden desplazarse a través de las carreteras y estacionar en un punto estratégico de la red vial para la vigilancia del tráfico. Los carros radares no requieren de personal adicional para su operatividad, son monitorizados por láser y las multas por exceso de velocidad son gestionadas de forma automática, ya que también cuentan con conexión a internet.
Las autoridades responsables del tráfico en Cataluña aseguran que, gracias a los carros radares se han reducido en un 80% los accidentes en las zonas donde han sido desplegados, por lo que han demostrado una alta eficacia.
Estos novedosos equipos forman parte de una estrategia integral del SCT para aumentar la seguridad vial y reducir los siniestros. Según lo explicado por las autoridades en su página web, se espera que con la implantación de estos novedosos controladores viales en 10 años se reduzca la mortalidad por accidentes de tráfico en un 50%.
