Las personas escuchan con frecuencia que el desayuno es la comida más importante del día. En esa primera comida del día, el organismo se potencia con los nutrientes necesarios para enfrentar la jornada.
Muchos se toman al pie de la letra esta afirmación. Se preparan desayunos contundentes, con huevos, pan, queso, tocino, embutidos. De este modo creen que hacen realidad esa idea de “cargar energías” para vivir el día.
Otros, más atentos a las dietas naturales, prefieren un desayuno ligero, con frutas, yogur o batidos, buscando una opción ligera fácil de digerir. Y también están los que acostumbran a desayunar solo un café de paso y, si tienen a mano, una tostada o una galleta.
¿Qué dicen los médicos y nutricionistas?
El criterio de lo que es un “buen desayuno” ha evolucionado. Desde los tiempos en los que el “buen” indicaba abundancia que generaba sensación de saciedad, se ha pasado a una época en lo que importa es la calidad y no la cantidad.
Esto lo saben bien las personas que siguen la tendencia a las dietas saludables. Pero hay mucha gente que no conoce con certeza qué conviene desayunar y qué alimentos se deberían evitar en esa comida.
Para aclarar las ideas, el médico internista Alexandre Olmos ha publicado en las redes sociales cuáles son los tres peores desayunos que se consumen más frecuentemente.
¿Quién es el doctor Alexandre Olmos?
El doctor Alexandre Olmos realiza publicaciones frecuentes en las redes sociales, que ofrecen consejos útiles para la salud de la gente. Los expresa de una forma sencilla y clara, de modo que todos los pueden entender.
Se trata de sugerencias que fomentan los hábitos saludables y de costumbres que las personas tienen y que no saben que las perjudican. Sus aportes son una buena fuente de aprendizaje para la gente que no tiene conocimientos específicos sobre su organismo y lo que le hace bien o mal.
Con respecto al desayuno, el médico destaca la importancia de seleccionar adecuadamente los alimentos. Insiste en que esta comida influye significativamente en los niveles de energía y en el bienestar general. Pero no da lo mismo comer cualquier cosa.
¿Qué no se debe comer en el desayuno?
Según este médico, existen tres tipos de desayunos que son comunes y que pueden ser perjudiciales.
Pan blanco y cereales azucarados
Ambos alimentos son clásicos en la mayor parte de los desayunos. El médico argumenta que provocan un rápido aumento de los niveles de azúcar en sangre seguido de una caída brusca. Este nivel sube y baja puede generar fatiga y antojos descontrolados de seguir comiendo.
Por otro lado, estos dos alimentos carecen de nutrientes esenciales que el cuerpo necesita para funcionar correctamente. Por lo tanto, poco aportan.
Zumos de frutas y batidos con alto contenido de azúcar
Aunque parecen opciones saludables, consumir zumos de frutas o batidos con exceso de frutas puede aportar una cantidad excesiva de azúcar al organismo. Esto provoca picos de insulina, que posteriormente se traducen en cansancio y sensación de hambre.
Café torrefacto
El café torrefacto es, para el Dr. Olmos, el peor de los tres alimentos. En el proceso de tostado, en el café que comúnmente se consume se incluye azúcar, con los problemas que el exceso provoca.
Además, los compuestos químicos generados durante el proceso de elaboración del café torrefacto, son agentes inflamatorios y pueden perjudicar el sistema digestivo y disminuir la absorción de nutrientes.
A los amantes del café, que no pueden prescindir de esta bebida, Olmos les sugiere que opten por versiones de café de alta calidad y en estado natural.
Un desayuno saludable debe incluir una combinación equilibrada de macronutrientes y micronutrientes que proporcionen energía sostenida y favorezca el bienestar vegetal. Para conseguirlo, es fundamental integrar alimentos de calidad que aporten carbohidratos complejos, proteínas, fibra, vitaminas y minerales.
