El invierno es una estación en la que los conductores deben estar más atentos a las condiciones meteorológicas, pues estas afectan desde la visibilidad hasta la capacidad para desplazarse de forma segura por las carreteras y autopistas. Lluvia, viento, nieve y niebla son algunos de los fenómenos climáticos que pueden provocar accidentes al afectar la visibilidad; mientras la presencia de hielo en la calzada incide en la capacidad de agarre de los neumáticos.
Por otro lado y en el caso de las carreteras en zonas montañosas, aumentan las posibilidades de bloqueos causados por acumulación de nieve y derrumbes. A esto hay que sumar la necesidad de disponer de elementos para protegerse del frío en caso de accidente, o de quedar paralizado por un atasco.
Para hacer más complicada la situación, aunque al mismo tiempo es una forma de llamarnos la atención, hay que estar atentos a no cometer infracciones de tráfico, características de esta época del año. Hemos de evitar terminar recibiendo un regalo inesperado de la Dirección General de Tráfico: multas que pueden oscilar entre 100 y 200 euros, por cosas como ir demasiado abrigado o tener la matrícula demasiado sucia, hasta por no usar un chaleco reflectante cuando salimos del vehículo en una carretera.
Algunos ejemplos de multas de la DGT
Exceso de abrigo: 100 euros
Parece absurdo que nos puedan multar por ir excesivamente abrigados, una práctica en la que suelen incurrir los que quieren gastar menos combustible usando poco la calefacción, o circulan en un coche donde este sistema no funciona. El exceso de abrigo puede hacer que el conductor pierda movilidad y afectar el modo de conducir el vehículo; también puede afectar el uso del cinturón de seguridad o impedir una salida segura del coche, en caso de accidente. La recomendación es utilizar el sistema de calefacción y mantener una temperatura en la cabina entre 20 y 22 °C.
Hielo en el parabrisas: 100 euros
Otra causa de infracción en las regiones donde las temperaturas caen por debajo de cero y son más frecuentes las nevadas, es la de no retirar el hielo y la nieve del parabrisas, el techo y las ventanillas antes de comenzar a circular con el coche. No hacerlo puede causar un accidente al impedir que se muevan los limpiaparabrisas, o que el hielo del techo caiga y bloquee la visión. La multa es de 100 euros.
200 euros por la matricula sucia
Si la matrícula está cubierta de hielo o lodo puede dificultar su legibilidad por parte de las autoridades o de los sistemas de control utilizados por la DGT. La multa por no limpiar la placa puede ser de 200 euros.
No usar cadenas cuando es obligatorio: 200 euros
En las zonas donde es habitual que se forme hielo en las calzadas y, sobre todo, donde está presente la señal R-412, es obligatorio el uso de las cadenas para la nieve, y no hacerlo puede llevar a multas de 200 euros. La R-412 hace referencia a “la obligación de no proseguir la marcha sin cadenas para nieve u otros dispositivos antideslizantes autorizados que actúen al menos en una rueda a cada lado del mismo eje del motor, o neumáticos especiales de nieve”.
Otras multas de invierno
Otras infracciones frecuentes en invierno, aunque también pueden alcanzarnos en otras épocas del año, son:
- Circular con neumáticos en malas condiciones: 200 euros. Los neumáticos muy desgastados o con deformaciones pueden tener menos agarre o ser más susceptibles a pinchazos, que pueden conducir a accidentes.
- No utilizar chalecos reflectantes al salir del coche en una calzada: 200 euros.
Un sistema de luces deficiente o mal utilizado: 200 euros
Durante todo el año debemos estar atentos al mantenimiento de nuestro vehículo y al entorno. Pero en invierno todavía más, porque hay factores externos que inciden en la conducción.
