En una empresa exitosa, la psicología es un eje estratégico para comprender, motivar y potenciar el talento humano. Pero no siempre fue así. La historia del tratamiento a los empleados ha transitado desde modelos autoritarios centrados exclusivamente en la productividad hasta los enfoques actuales, más humanizados y participativos.
En la Revolución Industrial, por ejemplo, los trabajadores eran vistos y tratados como piezas de un engranaje dedicado a la producción. A lo largo del siglo XX los movimientos sociales impulsaron mejoras en las condiciones de trabajo. Se instaló el inicio del reconocimiento de derechos, necesidades emocionales y dinámicas sociales.
A medida que las sociedades occidentales han evolucionado, la valoración del talento ha llevado a considerar el bienestar de los trabajadores como factor de mejora. Las empresas han reconocido que dependen de los empleados y que en sus manos está un gran porcentaje del éxito. La psicología organizacional ha permitido entender que una empresa no es solo un lugar de trabajo para el empleado. Allí se tejen relaciones que condicionan su desempeño. La motivación, el liderazgo, la comunicación y la cultura corporativa repercuten en los resultados de la empresa.
Así lo entiende Juan Roig, el presidente de Mercadona. Consciente de la importancia de atender al trabajador para sostener una empresa consolidada y productivamente próspera, aplica este principio en su cadena de supermercados.
¿Por qué los gerentes de Mercadona cobran 2.100 euros al mes?
Juan Roig tuvo a su cargo la inauguración del 40° Congreso de Empresas de Gran Consumo de AECOC, celebrado en Valencia. Su intervención combinó la reflexión personal, con una profunda crítica institucional a las políticas financieras. El corazón de su mensaje fue un llamado de atención a los empresarios.
Con énfasis afirmó que “el trabajador no es solo manos, es corazón y cerebro”. Destacó que para que la empresa funcione bien, el empleado necesita sentirse bien tratado como ser humano. Este posicionamiento filosófico, con apoyo en la psicología, se traduce en políticas salariales que superan la media del sector. Un caso simbólico de que este principio es muy útil, es Mercadona. Sus gerentes cobran 2.100 euros mensuales.
Roig destacó que cuidar a los empleados es cuidar el negocio. No se trata de conceder todo lo que el trabajador demanda. Es necesario atender a lo que el trabajador necesita. En España, y en el resto del mundo también, los trabajadores necesitan salarios dignos, estabilidad laboral y condiciones laborales que favorezcan los acuerdos y la convivencia.
¿Cuáles son los sueldos que paga Mercadona?
El sueldo bruto inicial para los nuevos empleados es de 1.685 euros mensuales en 12 pagas. Es un salario que está más de 300 euros por encima del Salario Mínimo Interprofesional. El 2024 marcó un hito en la trayectoria de Mercadona. Cerró el ejercicio del año con un crecimiento de un 9% en sus ventas. Esto significó ganancias netas de 1.384 millos de euros, un 37% más que el año anterior.
Ante este beneficio, la empresa implantó sus mejoras para que alcanzaron a sus empleados. Elevó sus salarios en un 8,5% y distribuyó más de 700 millones de euros en primas. Existieron algunas quejas que marcaron que estos beneficios no alcanzaron a los empleados que estaban de baja, lo que consideran una vulneración de sus derechos. Pero, la ley amparó a la empresa, para la que estas mejoras fueron un estímulo al trabajo real.
Mercadona puso en práctica su principio rector de que el empleado contento se involucra y mejora el negocio. Estímulo y premio al trabajo para unos, presión laboral para otros. Lo cierto es que Mercadona tiene una plantilla estable de empleados que parecen estar conformes con la empresa. Los 120.000 trabajadores de Mercadona se sienten como un orgullo para el sistema empresarial español.