Los aficionados a la historia del cine y a los movimientos de la farándula hollywoodense, saben que John Travolta tuvo al menos dos grandes etapas como estrella cinematográfica: la que comenzó con Fiebre del sábado noche, en 1977, y su renacimiento con Pulp Fiction, en 1994. En su primera y muy corta etapa, antes de comenzar una larga decadencia (que Tarantino interrumpió en los 90), Travolta protagonizó otra cinta exitosa y considerada hoy en día como una película de culto, Grease, estrenada en 1978. En la conocida película estuvo acompañado en los roles principales por la actriz australiana Olivia Newton-John.
El empeño de John Travolta nos dio a Olivia Newton-John
Para Randal Kleiser, el director de este musical, no había duda de que el protagonista debía ser John Travolta, ya elevado a la fama por su extraordinario papel como Tony Manero en Saturday Night Fever. Sin embargo, para su contraparte femenina estaba pensando en actrices como Carrie Fisher o Marie Osmond.
En la película, Sandy se enamora de Danny (Travolta) durante unas vacaciones de verano, y ambos interpretan y bailan varias coreografías que han colocado a esta película entre los musicales más exitosos de la segunda mitad del siglo XX. Y el director y los productores querían para el papel de Sandy a una actriz que fuera tan conocida como John.
Pero Travolta había quedado deslumbrado por la actriz australiana de 29 años, a la que había visto por primera vez actuando en un musical de Broadway, tal y como contó en una entrevista en 1981:
“Había insistido mucho en Olivia. Deseaba muchísimo que ella estuviese en Grease porque la vi en un musical de Broadway. Dije que la Sandy perfecta, la Sandy definitiva sería Olivia Newton-John”.
Es posible que como candidata a actores estrella con Travolta haya jugado en contra su edad: para ese momento, Newton-John tenía 29 años y Travolta 24. Sin embargo, el actor insistió: “Le dije a los ejecutivos de Paramount: ‘no hay otro ser humano en el mundo que pueda interpretar a Sandy, aparte de Olivia Newton-John’”, contó en una entrevista con Ellen Degeneres en 2012.
Incluso Olivia dudaba
El director y los ejecutivos no fueron las únicas personas que Travolta debió seducir para que la actriz australiana personificara a Sandy en la película, también debió convencer a Olivia, que no estaba muy segura de ser la actriz adecuada para el papel.
“Olivia dijo: ‘Bueno, lo haré, pero primero tengo que verme en una prueba de cámara’”. En palabras de la actriz: “Dije: ‘Haré una prueba de cámara y si no me gusto, entonces no quiero’. Así que él fue lo suficientemente amable como para hacerlo conmigo y afortunadamente estuvo bien. Por eso lo hicimos”.
La labor de Travolta respecto a la actriz no concluyó allí, al actor se le pidió que convenciera a la actriz, que no estaba muy ganada a la idea, de hacer una escena que actualmente es una de las más celebradas del filme, la del baile en la feria con la canción “You’re The One that I Want”.
“Dije: ‘Créeme, será fantástico. Te metes en esa ropa negra y muy sexy y todo, al público le encantará”.
Casi medio siglo después, un musical que no tenía mayores pretensiones sigue atrayendo espectadores de nuevas generaciones. Grease parece ser tan solo un musical que celebra la adolescencia, la música y el amor en un momento de los años 50, y quizás es eso lo que la hace eterna: la sencillez del argumento, la juventud y el eterno encanto de John Travolta y Olivia Newton-John.
La película sirvió para forjar una amistad entre ambos artistas que se prolongó por más de cuatro décadas, y que volvió a un primer plano tras el fallecimiento de la actriz en 2022.