Para muchos trabajadores, la baja médica puede ser una especie de “santuario laboral”, una situación en la que de alguna manera se está protegido de eventos como un despido inminente. Pero esta creencia no está avalada por las leyes, y en el Estatuto de los Trabajadores se indica cuándo es posible que nos despidan, aunque estemos de baja por enfermedad.
Al derogarse en 2020 el apartado “d” del artículo 52 del Estatuto de los Trabajadores, que permitía el despido por acumulación de ausencias, aunque estuvieran justificadas por enfermedad, muchos trabajadores creyeron que estaban protegidos de una acción de este tipo estando de baja médica, pero no es así.
Las razones por las que nos pueden despedir estando de baja médica
Al suprimir este apartado en el artículo 52, se protegió al trabajador de ser despedido por las ausencias continuas por estar de baja médica. Es decir, que dicha baja no puede ser una razón para cortar la relación laboral, pero sí podemos ser despedidos por otros motivos, aunque nos encontremos en esta condición. Lo cierto es que el Estatuto de los Trabajadores permite los despidos, incluso estando de baja médica, por razones económicas, organizativas y disciplinarias.
Entre las causas objetivas por las que pueden despedirnos, sin importar si estamos enfermos o activos, se incluye el hecho de que una empresa entre en una crisis económica, esté realizando una reestructuración interna (que elimine el puesto de trabajo que ocupamos), y cuando se presenta otra situación justificada que implica despidos colectivos. En este último caso, el despido de empleados que están en situación de baja médica debe estar bien argumentado por parte de la empresa.
El despido disciplinario y por ineptitud sobrevenida
Estar de baja médica tampoco nos protege de un despido disciplinario. Si antes de caer enfermos tuvimos muy bajo rendimiento laboral, cometimos alguna falta grave, incumplimos con normas o no seguimos las órdenes o instrucciones de forma reiterada, podemos ser objeto de un despido disciplinario, lo que implica que tampoco recibiremos indemnización.
Por otro lado, si la enfermedad que motivó la baja no fue causada por el trabajo, no es una enfermedad laboral o profesional, nos inhabilita para volver a ocupar nuestro puesto o para ocupar otro puesto en la empresa, el despido puede estar justificado.
En ambos casos, la empresa debe documentar muy bien las razones por las que se despide al trabajador. También podemos ser despedidos estando de baja médica si la empresa cierra definitivamente por quiebra o cualquier otro motivo. En este caso, se quedan sin trabajo todos los trabajadores, sin importar en cuáles condiciones se encuentren.
Qué debemos hacer si nos despiden estando de baja médica
Los abogados laborales recomiendan seguir los siguientes pasos si nos despiden estando de baja médica por enfermedad, accidente o por una intervención quirúrgica:
- Leer con atención la notificación de despido: que indique claramente la fecha a partir de la cual se hace efectivo el despido y los motivos para tomar esta decisión.
- Si nos parece que el despido no está justificado, buscar asesoría legal, es decir, consultar con un abogado especializado. Si el despido no es justificado, o lo hacen teniendo como causa nuestra incapacidad temporal, es probable que podamos impugnar el despido.
- Si consideramos que hay razones para rechazar el despido, podemos introducir un reclamo ante el SMAC (Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación), o también introducir una demanda ante el juzgado de lo Social que corresponda.
Si el despido es improcedente, es probable que la empresa se vea obligada a pagarnos una indemnización (si el caso llega a tribunales), o a reincorporarnos a nuestro puesto, pagando los salarios caídos.
