Las rotondas están pensadas y diseñadas para mejorar la movilidad, evitar accidentes y reducir los conflictos en las intersecciones. Tienen regulaciones específicas que establecen quién tiene la prioridad y cómo debe procederse cuando se circula por ellas. Sin embargo, en la práctica siempre son puntos de conflicto que generan una alta siniestralidad. El incumplimiento de las reglas se debe a factores diversos.
En algunos casos, los conductores incumplen las normas sabiendo que lo están haciendo. En otros, hay desconocimiento o interpretaciones erróneos de la normativa. Un problema que es causa frecuente de accidentes consiste en salir de la rotonda desde un carril interior, con una maniobra cruzada. Pero el que más accidentes provoca es el acceso a la rotonda sin ceder el paso a quienes ya circulan por ella.
La prioridad es el centro de mayor impacto en conflictos y accidentes en rotondas. De acuerdo con la información de la DGT, las infracciones vinculadas a la prioridad de paso representan el 20% de las que ocurren en las rotondas. Ante la desconformidad de los conductores por las sanciones por no ceder el paso, respetar la prioridad e incumplir otras normas de regulación para las rotondas, la DGT insiste en que hay medidas severas para los infractores.
¿Qué sanciones se aplican a los conductores en las rotondas?
La circulación en rotondas tiene tres momentos diferenciados: ingreso, circulación en ella y salida. En los tres el conductor debe ajustarse a pautas específicas. Si no lo hace, será sancionado. Las sanciones son las siguientes:
No respetar las prioridades o mantener velocidad excesiva al ingresar a la rotonda
Acceder a la rotonda sin ceder el paso respetando las prioridades y mantener una velocidad excesiva se sanciona con 500 € de multa. Además, se retiran 6 puntos del carnet de conducir. La entrada a la rotonda es el momento en que se producen más de la mitad de los accidentes en intersecciones. La DGT aconseja disminuir la velocidad y observar el tráfico que viene por la izquierda para ceder el paso si hay vehículos circulando.
Es necesario esperar a que haya un espacio en el que el vehículo se pueda meter con seguridad.
Cruzar carriles para salir
Cruzar uno o más carriles para salir de la rotonda se tipifica como “conducción temeraria”, porque pone en riesgo a otros vehículos. Se castiga también la multa de 500 € y la pérdida de 6 puntos del carnet. Una vez circulando por la rotonda, es conveniente elegir el carril que más convenga al destino. El carril exterior siempre es una buena opción si la salida está cerca.
Si no se logra espacio en el carril exterior cuando se está en la salida, hay que dar otra vuelta a la rotonda. Cruzarse de carril es una maniobra antirreglamentaria, además de muy peligrosa.
No señalizar las maniobras
Cada maniobra debe señalizarse, en especial los cambios de carril y la salida de la rotonda. Si no se cumple con esta norma, también se aplican multas de hasta 200 euros.
No ceder el paso a un ciclista al salir
Los ciclistas que circulan en rotondas tienen prioridad para salir de ellas. No respetarlo se sanciona con 500 € de multa y 6 puntos del carnet.
El mensaje de alerta de la DGT se difunde
La DGT incrementa su campaña para reducir las infracciones y los accidentes en rotondas. Ha destinado un apartado especial en su web para explicar cómo debe actuar el conductor cuando llega a una rotonda. Otros organismos se han adherido a esta difusión insistiendo en las precauciones que hay que tener en cuenta en las intersecciones. La desinformación no es una excusa.
El conductor que duda, tiene formas de informarse. Y si pese a todo lo que sabe comete infracciones, lo espera la sanción.
