Las mascotas desempeñan un papel fundamental en la vida de muchas personas. Proporcionan compañía, afecto, bienestar emocional. Muchos médicos y psicólogos consideran que benefician a niños y adultos, pues contribuyen al desarrollo de vínculos afectivos que impactan en la convivencia y la armonía en sociedad.
Cada vez más hogares cuentan con un animal de compañía. Esa relación entre personas y mascotas se considera valiosa para la calidad de vida. Su presencia ayuda a reducir el estrés, la ansiedad y la depresión, especialmente en personas que viven solas o que atraviesan momentos difíciles. Para personas con ciertas discapacidades, los animales de asistencia son imprescindibles.
La sociedad poco a poco va reconociendo el papel esencial de los animales en la vida de las personas, fortaleciendo la idea de que las mascotas deben ser integradas a la familia y ser atendidas adecuadamente.
En España, la concienciación sobre el bienestar animal ha aumentado en los últimos años. Se han generado normativas que buscan garantizar la protección de los animales en general y de las mascotas hogareñas en particular.
¿Es posible deducir gastos por mascotas en la Declaración de Renta?
La Ley de Bienestar Animal permite a los propietarios de mascotas deducir ciertos gastos relacionados con el bienestar y la salud de sus animales. Se incluyen los derivados de revisiones veterinarias, vacunas obligatorias y tratamientos médicos.
Sin embargo, esta posibilidad es limitada y depende de la situación del contribuyente y de la Comunidad Autónoma en la que resida. Muchas comunidades autónomas no han implementado aún estas deducciones. En otras está funcionando.
¿Cuáles son los requisitos para deducir gastos de mascotas en la Declaración de la Renta?
Las deducciones fiscales son restringidas al ámbito de la atención veterinaria. No se contemplan deducciones por gastos de alimentación, por ejemplo. Para acceder al beneficio de la deducción de gastos, se deben cumplir las siguientes condiciones:
- Registro e identificación de la mascota. La mascota debe estar registrada oficialmente a nombre del contribuyente. Debe cumplir con las normativas de identificación animal de acuerdo a la comunidad de residencia. Es esencial que tenga toda su documentación en regla, incluyendo el microchip y la cartilla sanitaria.
- Justificación de los gastos que se deducen. Se deben conservar en perfecto estado todas las facturas y los recibos que acrediten los gastos veterinarios. Estos documentos son imprescindibles para justificar los gastos ante la Agencia Tributaria.
Los servicios de atención al animal deben ser ofrecidos por veterinarios debidamente colegiados y autorizados para ejercer esa profesión.
- Autónomos que trabajan con mascotas. Los autónomos que emplean animales en su actividad económica pueden deducir los gastos asociados. Por ejemplo, un ganadero puede desgravar los costos veterinarios de su ganado. Un vigilante que emplea perros guardianes, también puede hacerlo. Es esencial que estos gastos estén directamente vinculados a la actividad profesional y debidamente justificados con las facturas.
¿Hay topes en las deducciones por gastos de mascotas?
Las deducciones por gastos de mascotas varían según la Comunidad Autónoma. Algunas comunidades han comenzado a implementar deducciones fiscales con un tope máximo que varía entre los 100 y los 300 euros anuales.
Madrid, Valencia, Cataluña y Andalucía, por ejemplo, permiten deducir un porcentaje de gastos veterinarios que oscila entre el 15% y el 25%, con un tope máximo. En Madrid se puede deducir el 20% de los gastos con un límite de 300 euros anuales.
Es importante consultar la normativa fiscal específica de la Comunidad Autónoma para informarse con certeza acerca de este beneficio fiscal. En caso de que esta deducción esté disponible, se realizará la gestión en la plataforma de la Renta Web, en la que se desglosará el gasto total del servicio veterinario. El descuento correspondiente se aplicará de manera automática.