La vida de los usuarios en internet continúa en el verano. Es cierto que las personas se toman unos días de vacaciones para desconectarse de sus actividades de siempre. Se instalan en una nueva casa para la temporada y cambian las rutinas. Sin embargo, nadie se desconecta completamente de internet. Siguen en actividad los grupos de amigos, los contactos familiares, el entretenimiento, que están tan vigentes como siempre.
Además, hay personas en una familia que combinan ocio y trabajo online, que continúan con el teletrabajo aún en otra vivienda de verano. Internet es imprescindible también en vacaciones fuera de casa. Es por eso que, cuando las personas se trasladan hacia una residencia de verano, propia o alquilada, una de las preocupaciones es contar con un servicio de internet.
En el mercado de internet para segundas residencias veraniegas las empresas compiten por la conquista de los clientes.
¿Cuál es la propuesta de internet de Movistar para las segundas residencias?
Movistar ha simplificado su propuesta, que difiere en precios según las y características. Ofrece a sus clientes el producto “Fibra Adicional” para segundas residencias a costos diferenciales. El costo es de 15 euros los 300 Mb. El precio sube a 20 euros si se opta por 600 Mb y si se prefiere 1Gb el precio a pagar es 25 euros mensuales.
¿Qué propone Orange para el internet en la casa de verano?
Orange no se queda atrás en su lucha por la conquista del mercado. Ofrece una Línea Adicional de Fibra por 15 euros mensuales. Pero este precio incluye los 600 Mb. Un factor diferencial por el que aventaja a Movistar. También es más interesante la opción de tener 1 Gb, que incluye llamadas y WiFi 7. Su precio es 21,95 euros.
¿Cuál es la diferencia de Vodafone para segundas residencias?
Vodafone se suma a la competición por los clientes del verano con una propuesta diferente en el sistema, aunque similar en precio. Su plan incluye internet 5G y WiFi6. No requiere instalación técnica y el usuario lo lleva con él adónde quiera. Cuesta 15 euros al mes. Esta propuesta, que resulta práctica y muy de acuerdo con las necesidades actuales, depende de la existencia de 5G en el lugar en el que se instala el usuario.
En este sentido, se ofrece la posibilidad del internet clásico con fibra óptica de 600 Mb también por 15 euros al mes. Con 5 euros más se accede a la ampliación a 1 Gb.
La idea de Vodafone es ofrecer opciones que se ajusten a las necesidades de los clientes, tanto de internet fijo como móvil. Sus propuestas permiten que tanto los que realizan escapadas rápidas como los que se instalan por más largo tiempo en una residencia de verano tengan cubierta su necesidad de internet.
Además, Vodafone intenta conquistar el mercado de las casas vacacionales con la marca blanca Lowi. Ofrece a sus clientes que compran sus servicios un bono de regalo de 300 Mb, que permanece activo desde junio hasta finales de agosto. El plan puede ser consumir en primer lugar los 300 Gb del bono antes de los datos de la tarifa. En caso de que estos datos no se consuman totalmente, se acumulan para el mes siguiente.
Las empresas menores intentan atraer la mirada por sus precios
Silenciosamente, otras operadoras menores operan en el mercado de internet para las segundas residencias veraniegas. Una de ellas es Yoigo, segunda marca de MasOrange. Es la que ofrece precios más bajos por la conexión con fibra óptica. Cuesta solo 9,90 euros mensuales con 600 Mb. Le sigue en precios MásMóvil, con una oferta de 300Mb de velocidad y teléfono fijo a un precio de 11,99 euros mensuales durante un año.
Las ofertas de todas las compañías están disponibles para sus clientes de internet. Además, suelen exigir tiempo mínimo de contrato.
