Los alimentos de nuestra dieta influyen en nuestra salud, eso es algo innegable y avalado por muchos especialistas y estudios, siendo el corazón uno de los órganos que más afectados se están viendo por las decisiones que tomamos en la cocina. Según Lauren Baldwin, cardióloga del Instituto de Salud Cardíaca y Vascular de Orlando (EE.UU.), ciertos alimentos están siendo los culpables de esos futuros (y quizás no tan futuros) problemas relacionados con una peor salud, habiendo hecho una lista negra con todos aquellos que aumentan el colesterol, elevan la presión arterial y favorecen la inflamación.
Los 6 peores alimentos que puedes incluir en tu dieta
Carnes procesadas
Este es el primer grupo de alimentos que Baldwin señala como uno de los más perjudiciales. Algunos ejemplos son los embutidos, las salchichas y los jamones curados que, si bien son productos bastante habituales en nuestra dieta, suponen una «triple amenaza» para el corazón:
- Poseen grandes cantidades de sal, algo que dispara la presión arterial.
- Son ricos en grasas saturadas, las cuales aumentan el colesterol LDL o mejor conocido como el “colesterol malo”.
- Tienen gran cantidad de radicales libres, es decir, sustancias que incrementan el riesgo de cáncer.
Si bien consumirlos muy de vez en cuando no es algo nocivo para nuestra salud, lo mejor es sustituirlos por proteínas más saludables, tales como pescados grasos, legumbres o frutos secos.
Patatas fritas
Este común aperitivo es uno de los alimentos menos saludables que nos podemos encontrar debido a que absorben grandes cantidades de aceite durante el proceso de fritura, por lo que tienen un nivel muy alto de grasas trans e insaturadas. Sumado a esto, las patatas fritas suelen contener exceso de sal, lo que se asocia a problemas de hipertensión y retención de líquidos.
Si queremos sustituir este aperitivo por una alternativa más saludable, lo mejor que podemos consumir son los frutos secos al natural o las palomitas caseras sin mantequilla.
Comida rápida
La comida rápida no podía faltar en esta lista y, si bien es algo obvio, su mención en la misma se debe a que son un ejemplo perfecto de cómo los alimentos ultraprocesados pueden afectar de forma muy negativa a nuestra salud, ya que los productos que suelen acompañar a este término están llenos de calorías, grasas trans y sodio.
Como todo en esta vida, podemos consumirlos de vez en cuando y darnos un capricho, pero lo mejor es que limitemos lo máximo posible su consumo y prioricemos otras preparaciones caseras que incluyan ingredientes frescos y más saludables.
Carne roja
La carne roja es rica en proteínas, aunque no es tan saludable como se pensaba ya que tiene grandes cantidades de grasas saturadas y su consumo excesivo puede alterar la microbiota intestinal. Al igual que con las carnes procesadas, podemos consumirla pero estableciendo unos límites, y si queremos otra fuente de proteínas deberíamos incluir alimentos como las legumbres, los cereales integrales o los frutos secos.
Bebidas azucaradas
Este tipo de bebidas contienen mucho azúcar, algo que contribuye al aumento de peso aumenta el riesgo de sufrir diabetes de tipo 2. Por otro lado, si aparte de lo anterior incluyen cafeína, pueden provocar palpitaciones y arritmias, de forma que lo mejor es optar por infusiones o agua con un toque de limón o menta.
Palomitas del cine
No es que las palomitas en sí sean malas, ya que hemos hablado de ellas como una de las alternativas saludables en este artículo, sino que las que nos encontramos en los cines suelen tener gran cantidad de mantequilla, incluso aceites de coco o palma, los cuales son altos en grasas saturadas. ¿Qué podemos hacer para poder disfrutarlas? Hacerlas en casa con muy poco aceite de oliva.
