Desde la última semana del año pasado, ya es posible solicitar las ayudas en la Comunidad de Madrid para cambiar o mejorar las ventanas de nuestros hogares. Se trata de un aporte de 3.000 euros que se entregan a aquellos ciudadanos que soliciten participar en el Plan Renove de Ventanas, cuyo objetivo, irónicamente, no es que haya más ventanas abiertas al mundo, sino ventanas mejor cerradas. El objetivo de estos planes de renovación de viviendas es hacerlas más eficientes en el consumo de energía y de otros recursos que se pierden, debido al deterioro de diferentes componentes del hogar, como ventanas, cableado y tuberías. La restauración de edificios y otras viviendas contribuye a reducir su huella de carbono, es decir, el gasto de electricidad, y por tanto, de las energías fósiles que hay que consumir para producir esta energía.
Otro efecto colateral de estos aportes realizados por el gobierno de la comunidad, además de mejorar la calidad de vida, es contribuir a reducir la contaminación y la emisión de gases de efecto invernadero. Unas consecuencias que hasta ahora son parte inevitable del uso de derivados del petróleo para la producción de energía eléctrica.
El Plan Renove de Ventanas 2025
Para este año la Comunidad de Madrid ha dispuesto un fondo de 3.085.561 euros, con el que aspira a mejorar las ventanas de unos 4.000 hogares, y con lo que se podría ahorrar hasta 3 millones de kilovatios hora (kWh). Esta medida es algo que beneficia tanto a los usuarios, que pagarán menos, como a la red de producción y distribución de energía.
Para participar en este plan hay que residir en la comunidad e introducir una solicitud a través de la Fundación de la Energía de la Comunidad de Madrid (FENERCOM). La solicitud será recibida y atendida en orden cronológico hasta el 31 de agosto, o hasta que se agoten los fondos.
El Plan Renove está dirigido a aquellos propietarios de viviendas, residentes de la Comunidad de Madrid, que desean reemplazar viejas ventanas que presentan filtraciones y fugas de energía, por modelos y diseños más eficientes, vendidos o instalados por comercios y empresas registrados en el Plan Renove.
Qué contempla el Plan Renove
Este Plan es llevado adelante con subsidios de la Consejería de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, y consiste en un aporte de 120 euros por cada metro cuadrado de vidrio de ventanas convencionales. Junto a ello, se tienen en cuenta 180 euros por metro cuadrado si se utiliza en capialzado motorizado, hasta una cuantía límite de 3.000 euros por residencia. Estos recursos se pueden destinar al pago de materiales, adquiridos en comercios que estén suscritos al Plan Renove, o al pago de mano de obra de empresas cualificadas, pero excluye el pago del IVA, que debe ser cubierto por los residentes beneficiados con esta ayuda.
Carlos Novillo, consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, ha señalado que con estos aportes se “contribuirá a disminuir la factura de la luz durante los meses de invierno y a mejorar el confort en los hogares de los madrileños”; y además ayudarán a “avanzar en el proceso de descarbonización, ya que favorecen la reducción de la huella energética en los edificios”. Estas declaraciones las realizó mientras visitaba una de las empresas que participan en este programa, Ibarra Ventanas.
Esta campaña implica la participación de empresas locales que se hayan registrado en el Plan Renove, para garantizar el correcto reciclaje de los materiales de las ventanas que se retiren. En definitiva se trata de promover la economía local, especialmente la de las pymes, autónomos y empresas que trabajan en la fabricación de perfiles, persianas, herrajes y vidrio, o se especializan en la instalación de ventanas y persianas.
