Una de las razones más comunes por la que podemos quedarnos varados en carreteras y autopistas es por problemas con la batería que alimenta todo el sistema eléctrico del coche (no hablamos de las baterías de los coches eléctricos). Es, de hecho, una de las principales averías que pueden presentarse cuando viajamos.
Esto es así porque en España hay un gran volumen de vehículos que fueron matriculados hace más de diez años y las baterías tienen una vida útil de entre 3 y 5 años, dependiendo de la calidad y del mantenimiento, por lo que en cualquier momento pueden descargarse y dejar de funcionar.
¿Qué hacer si no tenemos pinzas?
Cuando nos quedamos sin batería en la carretera, parece haber solo tres opciones: grúa, empujar el coche y aprovechar cualquier pendiente (si no es automático), y las tradicionales pinzas para ser auxiliados por otro coche. Pero hay otra alternativa poco conocida en España, y que consiste en combinar un arrancador portátil, o caja de arranque portátil, con un spray de líquido de arranque.
Esto es porque a veces no basta con conectar la caja de arranque a la batería para que el motor arranque y se mantenga. Y es aquí donde hay que escuchar la voz de la experiencia, que en este caso es personificada por el mecánico Scotty Kilmer, que recomienda, antes de intentar encender el coche, rociar con un spray con líquido de arranque el filtro de aire.
El spray y la caja de arranque portátil harán que el vehiculo vuelva a funcionar, y que podamos desplazarnos hasta nuestro destino, o hasta un sitio donde puedan ver qué le sucede a la batería.
Algunas recomendaciones, o es mejor prevenir que lamentar
El verano es la temporada del año en que más coches circulan por las carreteras y autopistas de España, y generalmente es también la época en que hacemos recorridos más largos con nuestros vehículos, con lo que aumentan las posibilidades de que salgan a la luz fallos y otros problemas en el coche.
Si nuestro vehículo tiene más de tres años de haber sido matriculado, o si recorremos más de 10.000 kilómetros al año, conviene revisar la batería con mayor atención. Es decir, niveles del agua en las baterías de plomo ácido, ver que los terminales estén libres de sulfato o de corrosión, y que el indicador de carga señale que está bien.
Si usamos el coche con poca frecuencia, y lo dejamos para viajes de fin de semana, es aconsejable ponerlo a funcionar cada cierto tiempo, para asegurarnos de que la batería mantenga la carga.
El coche avisa cuando la batería no está funcionando como corresponde
Generalmente hay señales de advertencia de que la batería no está funcionando bien o de que hay que llevarla a revisar. Una de las más evidentes es cuando tenemos problemas para arrancar el coche, y no solo durante mañanas muy frías, sino también en cualquier momento del día.
Otra señal evidente es la debilidad de las luces cuando el motor está apagado, como cuando vamos a cargar combustible. La debilidad de las luces es un claro indicio de que la batería tiene poca carga.
Otras cosas que podemos hacer cuando falla la batería
Si tenemos pinzas y sabemos usarlas, buscar ayuda para hacer el puente y arrancar el coche con la batería del buen samaritano. Si el coche no es automático y tenemos una buena pendiente, poner el coche en neutro, dejarlo ir, pasar la llave, pisar el embrague, meter segunda y luego soltar el embrague. Si el coche lleva suficiente velocidad, arrancará.
Si no tenemos pinzas, el coche es automático y no sabemos nada de mecánica, es recomendable disponer de un seguro que tenga servicio de auxilio vial.
