Una de las grandes conquistas laborales, además de los días de descanso, la reducción de las jornadas y la exclusión de los niños del mundo del trabajo, es la de cotizar en la Seguridad Social para gozar de un retiro digno. Una etapa que inicialmente comenzaba después de cumplir 30 años de trabajo, pero ahora está un poco más lejos.
Actualmente, en 2025, para jubilarnos en condiciones aceptables debemos haber cotizado durante 38 años y 3 meses, o tener 68 años y 8 meses, si no tenemos el número de cotizaciones requeridas. En la práctica, este panorama puede ser mucho peor para los jóvenes que se están incorporando ahora al mercado laboral.
Hasta los 71 ¿y más allá?
Un informe publicado por la Fundación BBVA y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas, IVIE, titulado “Presente y futuro de la juventud española”, afirma que aquellos a los que les corresponda jubilarse en 2065 no podrán hacerlo, si desean mantener el tren de vida con el que vivieron. Es decir, que a ese año podría corresponderle la jubilación, pero si solo cotizaron durante 30 años tendrán que trabajar al menos hasta los 71 para lograr una pensión completa.
¿A qué se debe esto? A que los jóvenes se están incorporando al mercado laboral mucho más tarde. Según este informe, entre los jóvenes entre 16 y 29 años la tasa de empleo es inferior en un 15% a la del mismo grupo etario en 2007.
¿Qué hacer si queremos mantener el mismo nivel de vida al retirarnos?
Da la impresión que hay que trabajar hasta los 71 años o, si queremos retirarnos antes, ahorrar hasta crear un fondo significativo que genere rendimientos y nos permita seguir viviendo como queremos. De lo contrario, podríamos ver una caída notable en nuestra calidad de vida.
Siguiendo la normativa vigente, tendremos que haber cotizado durante 40 años, para poder optar a una pensión completa. Si comenzamos a trabajar a los 25 años y no nos quedamos sin empleo en todo ese período podríamos vernos jubilando en buenas condiciones a los 65 años.
Pero si empezamos alrededor de los 30, y sufrimos un par de interrupciones laborales, tendríamos que esperar a llegar hasta más allá de los 70 para tener derecho a una jubilación completa.
Retrasar la edad: cuál es el panorama desde el punto de vista de los jóvenes
Para quienes están entrando ahora al mundo laboral las cosas no son fáciles, al menos cuando se habla de la alternativa de ahorrar para ir disponiendo de un fondo que ayude a compensar una pensión incompleta, por un retiro “temprano”. Desde los tiempos del covid-19, los precios de la vivienda, del transporte y de la comida no han dejado de subir, mientras los salarios no llevan el mismo ritmo.
Para muchos jóvenes trabajadores, los salarios se van casi completos en el pago de alquileres y en el sustento diario, con lo que ni siquiera piensan en viajar, y mucho menos en ahorrar. A esto hay que agregar la inestabilidad laboral creciente, causada por la irrupción de nuevas tecnologías, como la IA, que están eliminando una gran cantidad de puestos de trabajo.
El panorama de acuerdo con la Fundación BBVA el IVIE
Es probable que se produzcan nuevas modificaciones que lleven las cotizaciones a 40 años o más para obtener una pensión del 100%, aunque incluso con este tiempo las pensiones podrían verse reducidas a 90 y hasta un 80%. También es probable que a partir de 2040 se exija a los trabajadores un mayor aporte en las cotizaciones, sin que esto signifique que se podrán jubilar antes.
Esto quiere decir que ganaremos menos y posiblemente deberemos trabajar más, a menos que se produzcan cambios profundos en el ámbito laboral, y en la sociedad.