Cuando una persona tiene baja laboral, está eximida de asistir a su trabajo. Mientras dura la baja cumplirá las indicaciones del médico, y atenderá a los tratamientos y terapias. Hay quienes entienden que cuando un trabajador está de baja no puede moverse de su casa ni realizar tareas de ningún tipo. Pero esta creencia no refleja lo que dice la legislación.
Una persona de baja no tiene por qué permanecer confinada en su hogar. De acuerdo con lo que el médico estipule, podrá salir de su casa y realizar determinadas tareas que no perjudiquen su recuperación y que no sean incompatibles con la causa de la baja.
Sin embargo, aunque parece tan claro, parece que no lo es. Las bajas laborales y lo que se puede o no se puede hacer en esos períodos suelen generar conflictos y malentendidos. El caso del trabajador despedido por Renault al que la empresa deberá pagar una buena suma de indemnización así lo muestra.
¿Por qué Renault despidió al trabajador que estaba de baja?
Un trabajador de Renault solicitó baja médica en junio de 2023 por lumbalgia aguda. Mientras duró su incapacidad laboral, fue visto fuera de su casa, llevando una vida que a juicio de la empresa era normal.
¿Quién declaró haber visto al trabajador en esas actividades durante la baja? Después de escuchar algunos comentarios al respecto, la empresa contrató a un detective privado que tomó fotografías de estas acciones que el trabajador realizaba fuera de su casa. Renault consideró que este comportamiento no se correspondía con el motivo de su baja temporal.
¿Qué actividades hacía el trabajador durante la baja? Fue filmado y fotografiado conduciendo su automóvil, haciendo compras en el supermercado, limpiando su vehículo y saliendo con amigos.
A juicio de la empresa, estas acciones eran incompatibles con el motivo de la baja. Un año después, en junio de 2024, el trabajador fue despedido. La compañía entendió que si podía llevar esa vida también podía volver a su trabajo. La empresa no tuvo en cuenta que el médico que firmó la baja le sugería moverse y realizar ejercicios para fortalecer la espalda. Además, no le prohibía conducir.
La demanda en primera instancia
El trabajador despedido interpuso una demanda por despido improcedente. El Juzgado N° 1 de primera instancia de Valladolid que atendió esta demanda estableció que el despido era improcedente. El juez consideró que no se transgredían las pautas médicas ni la normativa legal. Disconforme con esta resolución, Renault decidió recusarla. Y el proceso legal continuó.
¿Cuáles fueron los argumentos que justificaron la resolución de despido improcedente del Tribunal?
En la segunda instancia, el caso fue tratado por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León. Este Tribunal ratificó la resolución de despido improcedente.
La compañía justificó el despido mencionando actividades realizadas por el trabajador que supuestamente eran incompatibles con la causa de la baja. Pero el tribunal confirmó que esas tareas no interferían con la recuperación. Pasear con amigos, conducir o limpiar el coche eran actividades propias de la vida diaria. Y para nada contradecían las indicaciones del médico ni las normas que regulan las bajas médicas.
El Tribunal argumentó también que, para justificar el despido disciplinario, debería haberse acreditado que el comportamiento del trabajador interfería en su recuperación y que estaba plenamente apto para trabajar. Pero nada de esto quedaba demostrado con las pruebas presentadas por la compañía.
La sentencia del Tribunal permitió que Renault optara por reintegrar al trabajador o pagarle 61.632,55 euros. La empresa podría iniciar una tercera reclamación en instancia de casación, pero parece que no la realizará.
El caso de Renault sienta un precedente interesante acerca de la valoración de las tareas que realiza un trabajador mientras está de baja laboral. En el caso del trabajador de Renault, el Tribunal consideró que nada de lo que hacía afectaba su recuperación ni era indicador de que estaba en plenitud para volver a trabajar.