Es uno de los platos más consumidos en el mundo y un símbolo de la gastronomía italiana, pero también una que se consume con gran sentimiento de culpa cuando no queremos engordar, sin importar si la salsa que lleva encima es pesto, Napoli o a la carbonara.
Hablamos, claro está, de la pasta en todas sus variedades, como espaguetis, lasaña, macarrones o tallarines, entre tantas formas que puede adoptar, y que por alguna razón misteriosa, hasta ahora, no produce los mismos efectos en los italianos que en nosotros, que apenas la vemos comenzamos a ganar peso.
El secreto está en la cocción
Leonardo Rejón es cirujano bariátrico, es decir, un profesional que se especializa en realizar intervenciones quirúrgicas relacionadas con la obesidad, y también un usuario o influencer en redes como Instagram (@drleonardorejon), en donde cuenta con más de 35.000 seguidores.
Ha sido allí donde este médico, con más de 20 años de experiencia, habló recientemente de cuál es la mejor forma de comer pasta, a la manera de los italianos, sin correr peligro de aumentar de peso de forma desmesurada.
¿Por qué los italianos pueden comer tres veces más pasta que cualquier otro europeo y sin embargo no engordar tanto? El secreto, según Leonardo rejón, está en que la comen al dente.
Al no dejar que la pasta se cocine por completo, parte de ella será tomada por el cuerpo como fibra y no se asimilará. En cambio, si la cocinamos bien vamos a absorber todos los carbohidratos.
Beneficios de la pasta al dente
Preparar la pasta al dente tiene otros beneficios, también mencionados por el doctor Leonardo Rejón. En primer lugar, al dejarla un poco dura el índice glucémico de la pasta es más bajo que al cocinarla por completo; de esta manera, “los azúcares tienen menos incidencia en el organismo”.
En segundo lugar, al comer la pasta al dente la sensación de saciedad llega más pronto y esto hace que comamos porciones más pequeñas. Al estar un poco más dura, también nos obliga a masticar más y durante más tiempo, lo que termina haciendo que comamos menos.
Otro factor que contribuye a crear sensación de saciedad es que, al estar poco cocida, la pasta tarda más tiempo en digerirse, algo que también ayuda a eliminar el picoteo entre comidas.
A esto hay que agregar que la pasta al dente presenta una mejor textura y apariencia, y se mezcla mejor con la salsa.
Cómo preparar la pasta al dente
No es nada complicado, y la mayoría de las personas que cocinan saben cómo hacerlo, pero no está de más recordarlo.
Para que la pasta nos quede al dente, hay que cocinarla en abundante agua, añadir sal, colocar la pasta cuando el agua esté hirviendo, probar la textura de vez en cuando o un par de minutos antes de lo que indican las instrucciones en el paquete, y escurrir de inmediato.
Los comentarios en el vídeo de @drleonardorejon
Mención aparte merecen algunos comentarios hechos por algunos seguidores del doctor Rejón y que no comparten su opinión, al menos en torno a si la pasta engorda o no.
Unos afirman que la pasta engorda sí o sí, pues se trata de puro carbohidrato, y si se come sin control va a hacer que aumentemos de peso.
Otro explica por qué los italianos no engordan y que el verdadero secreto está en que “un verdadero italiano compra pasta de calidad 100% sémola, no harina refinada”.
En todo caso, sigamos la recomendación de comer la pasta al dente, y hacerlo con moderación.