Situado entre los montes y bosques de la provincia de Segovia, existe un pueblo que parece sacado de un cuento de hadas, de esos tan edulcorados que plantea Disney, con sus monstruos, príncipes y princesas. Esta atmósfera tan bucólica es gracias a sus casas de piedra, calles empedradas y un ambiente que recuerda a las épocas medievales de donde vienen muchas de esas historias fantásticas, haciendo de este pequeño pueblo segoviano el escenario perfecto para una escapada romántica (o no) con la cual podernos sumergir en otros tiempos y escaparnos del bullicio que hay en las grandes ciudades.
Riaza, un sueño medieval sin castillo
Lo cierto es que Riaza no posee un castillo propio, aunque desde este lugar podemos visitar el Gran Castillo de Pedraza, fortaleza medieval construida entre los siglos XIII y XV sobre los restos de antiguas fortificaciones, y que ha sido testigo de incontables leyendas y acontecimientos históricos. Sus altas torres y sus gruesos muros de piedra cuentan cómo antaño esta zona fue importante, aunque ahora ya casi haya caído en el olvido para muchos.
A día de hoy, podemos entrar en este castillo restaurado que cuenta con todo lujo de detalles, incluso con la leyenda de un amor prohibido. Se dice que el señor del castillo, por aquel entonces el noble Sancho de Ribaura, obligó a una plebeya de gran belleza llamada Elvira a casarse con él, a pesar de estar enamorada de un labrador, Roberto.
Cuando el noble partió a la guerra, los amantes se reencontraron y el señor de las tierras, alertado de la infidelidad, mató a Roberto, lo cual desembocó en que Elvira se encerrara en la torre, la prendiera fuego y se clavase una daga en el corazón. Se dice que, a día de hoy, se puede ver a los espíritus de los amantes paseando por la zona.
El Valle de Riaza, otro de los lugares mágicos se Segovia
Riaza es mucho más que un pueblo medieval, ya que en esta zona la naturaleza es tan importante como los propios edificios y, el valle que lleva su nombre, es otro de esos lugares que nos harán pensar que hemos seguido a un conejo blanco y nos hemos colado en un cuento de fantasía. Es muy recomendable para los amantes del senderismo y la aventura, ya que el Valle de Riaza ofrece rutas que recorren sus montes y colinas, pudiendo disfrutar de unos paisajes por los que pasan ríos cristalinos y llenos de animales y flores.
Qué más podemos ver en Riaza
- La Plaza Mayor de Riaza es el corazón del pueblo, siendo una plaza porticada con soportales de madera y edificios de fachadas color ocre, un diseño típicamente medieval.
- La Iglesia de Nuestra Señora del Manto es un templo del siglo XV y destaca por su gran torre y su hermoso interior, en el cual podremos disfrutar de un retablo que consta del barroco.
- La arquitectura de sus casas de piedra tan bien conservada es otro de los atractivos de Riaza. Las calles empedradas y sus casas construidas con piedra y madera en el casco histórico son un ejemplo de la arquitectura tradicional segoviana.
- La Estación de Esquí de La Pinilla se encuentra a tan solo unos kilómetros de Riaza y es un destino ideal para los amantes de los deportes de invierno, aunque en verano también podremos disfrutarlo para hacer senderismo o rutas en bicicleta.
- El Hayedo de la Pedrosa es considerado uno de los bosques más bonitos de Segovia y visita obligatoria en otoño, cuando la zona se llena con tonos dorados y rojizos.
- Por último, tenemos la ruta de los Pueblos Rojos y Negros, siendo Riaza uno de los pueblos por los que poder empezar esta ruta, los cuales son llamados así por los tonos rojizos de la arcilla y el color oscuro de la pizarra con los que están construidas sus casas.
