Es una de las figuras más polémicas de la actualidad en el mundo de los coches, con admiradores y personas que lo siguen en todo el mundo, visto por muchos como un genio, pero también por otros como la encarnación de uno de esos supervillanos con los que debían luchar Superman o James Bond. No hace falta más para que cualquier lector sepa que estamos hablando de Elon Musk, el hombre más rico del mundo, cofundador, propietario o principal figura de empresas como Space X, X (antigua Twitter), Tesla y Neuralink. Citamos estas entre otras compañías con las que participa activamente, en varias de las transformaciones tecnológicas más importantes del siglo XXI.
Tesla ha sido, hasta hace poco, líder indiscutible del mercado de los coches 100% eléctricos; y decimos que hasta hace poco, porque ya hay empresas chinas que amenazan con arrebatarle el primer lugar en ventas globales de esta nueva tecnología automotriz. Una tecnología que todavía siembra dudas entre los conductores por sus altos precios, y porque varias marcas de automóviles siguen apostando por los motores de combustión que utilizan gasolina y diésel.
Los coches con etiquetas B y C y lo que dice Elon Musk
Los coches con etiquetas ambientales B y C son aquellos que salieron de las fábricas, y fueron matriculados a partir del 2001, en el caso de los que usan gasolina, y después del 2006, si se trata de coches que utilizan diésel. Son vehículos que empiezan a tener restricciones en los centros urbanos que tienen Zonas de Bajas Emisiones, aunque siguen siendo más que los coches eléctricos, y siguen teniendo defensores en todo el mundo. Si bien esto podría estar cambiando, y de ahí lo significativo de la frase de Musk respecto a este asunto, y a propósito del futuro de los coches eléctricos.
Musk ha afirmado que “el 99% de los coches serán eléctricos y autónomos en el futuro”; y que “los coches de gasolina con tracción manual serán como andar a caballo mientras se utiliza un teléfono plegable. Todavía ocurre, pero es poco frecuente”.
La comparación de Musk no puede ser más radical, si consideramos que la aparición del coche con motor de combustión acabó en muy poco tiempo, y en casi todo el mundo, con más de 4.000 años de tracción animal, en los que el caballo fue el principal medio de transporte terrestre. Los coches de motor de combustión han dominado por poco más de 100 años, y ahora hay señales, algunas estadísticas, de que su tiempo está por terminar.
Los porcentajes que justifican la afirmación de Musk
Para respaldar sus afirmaciones anteriores, Musk cita un estudio de Global EV Alliance donde se declara que menos del 1% de quienes han comprado coches eléctricos vuelven a adquirir un coche de motor de combustión. Se trata de una encuesta donde participaron 23.000 conductores propietarios de coches eléctricos de 18 países, y en la que más de un 92% de los encuestados afirmaron que no volverían a utilizar coches de gasolina.
Entre las razones esgrimidas por estos conductores para manifestar su apoyo a los coches eléctricos está el hecho de que a medio plazo producen menos gasto en mantenimiento y en la recarga de combustible, y que pueden ser hasta cinco veces más económicos que los vehículos de gasolina. Por otro lado, un 97% de los encuestados afirmaron sentirse cómodos con la experiencia de conducir un vehículo eléctrico y con el hecho de que se trate de una tecnología amigable con el medioambiente.
Este informe contradice en gran medida los rumores en torno a que hay cierta decepción con los coches eléctricos, y avalan el optimismo de figuras como el CEO de Tesla.
