El Adelantado de Segovia
  • Motor
  • Economía
  • Sociedad
  • El Adelantado
  • US
El Adelantado de Segovia

Ni baja médica ni contrato temporal: así es el ‘job hopping’, técnica que preocupa cada vez más a las empresas

por Paco Magar
1 de diciembre de 2025
Ni baja médica ni contrato temporal: así es el 'job hopping'

Ni baja médica ni contrato temporal: así es el 'job hopping'

Es oficial: este es el dineral que ha ganado en el último año el principal proveedor de turrones de Mercadona

Confirmado por expertos: estos son los mejores neumáticos para tu coche cuando llega el frío

Confirmado por expertos: los lavaderos de coches esconden un riesgo para tu coche que seguro que desconocías

En los últimos años, el comportamiento de los trabajadores ha originado una dinámica laboral que ha impactado profundamente en las empresas. Los cambios generacionales han determinado un nuevo escenario en el que la permanencia en el mismo trabajo no es un valor ni una aspiración. Los trabajadores valoran cada vez más la conciliación entre la vida profesional y personal y priorizan su bienestar. La movilidad laboral se ha intensificado como consecuencia de un cambio de mentalidad.

Los jóvenes llegan a un empleo sin proponerse una carrera lineal y segura para siempre. La experiencia diversa, la adquisición de nuevas competencias, el cambio, pesan más que la permanencia prolongada en una sola organización. Es la mentalidad propia de los millennials y de la generación Z. Estos jóvenes trabajadores se caracterizan por una actitud laboral que parece estar siempre atenta a cambiar de empleo de forma voluntaria. Generalmente, en períodos de menos de dos años.

El job hopping, esta práctica de cambiar de empleo con frecuencia, es el fenómeno social-laboral de esta época.  

¿Qué impacto tiene el job hopping en las empresas?

Para comprender y ajustarse a esta realidad, las empresas han tenido que  visualizar el fenómeno del cambio de empleo desde una nueva perspectiva. Tradicionalmente, el sector empresarial estaba acostumbrado a que sus empleados permanecían durante la mayor parte de su vida laboral. Era frecuente que muchos se jubilaran en la misma organización en la que ingresaron a trabajar muchos años antes.

El surgimiento del job hopping desestabilizó la inercia empresarial de la contratación de empleados. Obliga a una visión más dinámica, que responde a la de los trabajadores jóvenes. Si bien en un principio las empresas miraron con recelo esta movilidad, han empezado valorar beneficios y riesgos. Por un lado, estos trabajadores que practican job hopping se caracterizan por una buena capacidad de adaptación y suelen ser versátiles. Además, aprenden rápidamente, porque están siempre dispuestos a adquirir nuevas habilidades técnicas.  Son personas ambiciosas y competitivas, siempre aspiran a más.

Con esta actitud son portadores de aires de innovación que puede favorecer la evolución de la empresa. Eso es un factor interesante que la empresa puede aprovechar. La adaptación al cambio y la capacidad de gestionar incertidumbres son condiciones favorables para cualquier trabajo. Y los que practican job hopping las tienen. Rasgo de valor para una empresa.

Sin embargo, existe el riesgo de que la falta de estabilidad obstaculice una trayectoria sólida y el compromiso a largo plazo. Un job hopper puede abandonar su puesto de trabajo en el momento menos pensado. La rotatividad obliga a frecuentes procesos de reclutamiento. También genera costes en la formación para que el nuevo trabajador se integre a la actividad laboral.

Un impacto que puede perjudicar a la empresa según su naturaleza es la falta de cohesión de sus equipos. Los cambios frecuentes de personal afectan la estabilidad del clima organizacional.

¿Perjudica a los job  hoppings la vida laboral siempre cambiante?

Los job hoppings tienen esta naturaleza laboral cambiante independientemente de su futuro. Viven este presente en el que les interesa aprender, ganar más dinero, equilibrar la vida personal y la laboral. Sin embargo, es posible que en el camino y a largo plazo esa vida laboral itinerante tenga consecuencias no siempre beneficiosas.

Cuando una empresa ve en un currículo un cambio frecuente de trabajos, puede interpretarlo como señal de inestabilidad, de falta de compromiso y de constancia. Por lo tanto, pasará de largo a ese candidato. Además, el salto de una actividad a otra impide la especialización en profundidad en un área específica, que en ocasiones se requiere. A esto se agrega que el cambio frecuente y la exigencia de adaptarse a las nuevas empresas, puede generar agotamiento y estrés.

Una opinión de la UGT, sindicato de los trabajadores, dice que el job hopping puede funcionar en algunos sectores. Pero en otros, se puede convertir en un estilo que perjudique a la mayoría. En un país en el que el desempleo juvenil es una realidad, abandonar un trabajo puede conducir a una situación muy arriesgada. En muchas ocasiones en esos cambios subyace la precariedad laboral, disimulada de cambio voluntario.

  • Política de cookies
  • Política de privacidad

© 2024 El Adelantado de Segovia

  • Motor
  • Economía
  • Sociedad
  • El Adelantado
  • US

© 2024 El Adelantado de Segovia