Los grandes centros urbanos, con su tráfico incesante, medios de transportes masivos y multitudes que van y vienen, a menudo manteniéndose cada uno aislado, no parecen ser el mejor lugar para que la gente tenga gestos honrados y un comportamiento cívico, y sin embargo suceden. Desconocidos que ayudan a personas mayores a cruzar una calle, taxistas que devuelven paquetes olvidados en sus vehículos, personas que ponen parte de su tiempo para ayudar a un visitante o a recién llegados a encontrar una dirección, gente que lleva carteras repletas de dinero a la policía, para que localicen a sus propietarios.
Una mujer que devolvió una cartera con 800 euros
En noviembre de 2023, Carmen del Milagro, una vecina de Pamplona, encontró en el vagón de un tren una cartera con 800 euros en su interior. En ese momento no había nadie más y no podía saber quién era el propietario, por lo que procedió a llevarla a las oficinas de la Policía Nacional en Pamplona; específicamente, a la Oficina de Denuncias y Atención al Ciudadano.
Pasaron dos años y el propietario nunca apareció, por lo que la policía llamó a Carmen y le entregó los 800 euros, quedando confirmado de esta manera que la honradez siempre, o casi siempre, es recompensada, aunque se puede tardar un poco. La historia fue contada recientemente en El Diario de Navarra y no deja de tener su toque de misterio. El contenido total de dinero en la cartera era de 817,96 euros; también había tarjetas de crédito y otros documentos que indicaban que la cartera pertenecía a un ciudadano turco, que nunca se presentó a reclamarla.
Lo que dice la ley cuando alguien no reclama dinero recuperado
Cuando se trata de objetos perdidos, la ley que señala lo que se debe hacer con estos cuando no aparece el legítimo propietario es el Código Civil, en su artículo 615, donde indica que las autoridades harán lo posible por difundir la noticia en torno al objeto extraviado, y luego:
“Pasados dos años, a contar desde el día de la segunda publicación, sin haberse presentado el dueño, se adjudicará la cosa encontrada o su valor al que la hubiese hallado”.
El Código Civil, aunque ha sido actualizado, es de 1889 y algo de ese tiempo quedó en su lenguaje. En este artículo también se indica al principio que la persona que encuentre un objeto perdido debe dejarlo en manos de las autoridades. Fue exactamente lo que hizo Carmen del Milagro al entregar ese día de noviembre la cartera en la Oficina de Denuncias y Atención al Ciudadano.
En esa ocasión recibió copia de un acta donde se inventariaba el contenido de la cartera. Y al salir activó una alarma que se disparó hace pocos días, avisándole que habían transcurrido los dos años. Carmen contactó a la Policía Nacional y el miércoles 12 de noviembre acudió a las dependencias de este organismo, y de nuevo se elaboró un acta, pero esta vez para indicar que estaba recibiendo los 800 euros, que dos años atrás intentó regresar a su legítimo dueño.
En caso de que el ciudadano turco reaparezca, es probable que pueda recuperar sus documentos de identidad y las tarjetas de crédito, pero ahora sí que puede dar el dinero en efectivo por perdido. Gestos como el de Carmen sirven como indicadores de que los valores ciudadanos se mantienen, a pesar del deterioro que se ha dado en otros aspectos de la vida de los pobladores de los grandes centros urbanos, y que es importante reforzarlos si queremos vivir mejor.