En España ha pasado de todo; incluso desde antes de la llegada del Homo sapiens, cuando los principales homínidos de la provincia eran neandertales, hasta nuestros días. Es por ello que en cada lugar, cada pueblo, incluso aquellos donde hoy en día solo queda un centenar de personas, siempre hay algo que contar de importancia histórica, social o cultural.
Cuando se piensa en la Edad Media española enseguida nos viene a la mente la fuerte presencia musulmana en el sur, y ciudades como Toledo, Barcelona, Ávila o León, además de Córdoba y Granada. Sin embargo, hubo otras que jugaron un papel importante en la historia de España y en las que actualmente quedan apenas un millar de habitantes, como sucede con Alcañices.
Desde los romanos hasta el tratado de Alcañices
Alcañices es un poblado con apenas un poco más de 1.000 habitantes, que se encuentra a 60 kilómetros al noroeste de Zamora, capital de la comarca de Aliste y último poblado importante antes de llegar a la frontera de Portugal. Pero no es solo eso. Es también un lugar por donde pasaron legiones romanas en la Antigüedad, presencia mora no confirmada (de algún lado tiene que venir el nombre), visigodos y al menos cinco reyes durante la Edad Media.
Fue una población que perteneció a los templarios, y donde se firmó un tratado que definió las fronteras entre España y Portugal, cuando todavía no existía España. El nombre es claramente de origen árabe, y hay cierto consenso en que significa “las iglesias”, aunque otros opinan que podría traducirse como “las cañas” o cañizos, que eran muy abundantes en el río Angueira, que atraviesa el pueblo.
Lo curioso es que no existen registros escritos o arqueológicos de la presencia musulmana en este lugar, aunque sí romano, que dejaron una calzada que pasa por Aliste y que, para aumentar la confusión, se conoce como “Camino Morisco”. Los cinco reyes que estuvieron en Alcañices fueron Alfonso IX de León, Fernando III de Castilla (siendo infante), Fernando IV de Castilla, Dionisio I de Portugal y Juan Carlos I de España, en 1997, año en el que también recibió la visita del presidente de Portugal, Jorge Sampaio.
Pero el evento histórico más importante ocurrido en este pueblo fue el que reunió a Fernando IV de Castilla y, su madre, que actuaba como regente, María Molina, con Dionisio I de Portugal, el 12 de septiembre de 1297, cuando firmaron el tratado en el que se establecían los límites entre los reinos de Portugal y Castilla. Este acuerdo no solo acabó con una serie de conflictos fronterizos, también fue un tratado de paz y sirvió para establecer alianzas matrimoniales.
Lugares que visitar en Alcañices
La Noble, Ilustre e Histórica Villa de Alcañices conserva varios aspectos históricos que vale la pena visitar, como el monasterio de San Salvador, fundado en el siglo XII, o la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Este es quizás el edificio más importante del pueblo, y que todavía guarda elementos de la arquitectura románica.
Permanecen también las ruinas de la muralla y del castillo medieval, que sirven para recordar el pasado militar y la importancia estratégica de esta villa. Alcañices se encuentra dentro de la reserva de la biosfera transfronteriza “Meseta Ibérica”, declarada zona protegida por la Unesco desde 2015, y en sus alrededores se pueden hacer paseos por sus bosques de pinares, castaños y robles.
Es un lugar donde vale la pena detenerse a visitar, y los conocedores dicen que las mejores épocas para hacerlo son primavera y otoño, por lo que estamos a tiempo. Una mezcla de cultura y naturaleza que bien vale la pena experimentar.