El hecho de estacionar un coche en estos tiempos puede ser un desafío para los conductores. La escasez de espacios disponibles hace difícil encontrar un lugar habilitado y seguro. Para lograr su objetivo, algunos encuentran espacios que tienen dificultades extra y no dudan en ocuparlos. Sin embargo, hay situaciones en las que las características de la calzada, la impericia o la falta de conocimiento del conductor, pueden provocar accidentes que involucren a otros vehículos y personas.
El estacionamiento en pendiente, cuesta arriba o cuesta abajo, es un gran desafío que requiere de atención a y de conocimiento de algunas técnicas.
¿Cuáles son los consejos de los expertos para aparcar en cuesta arriba?
La empresa Mapfre cuenta con expertos que han difundido una serie de tips para estacionar en pendiente, sea cuesta arriba o cuesta abajo. Es claro que la principal dificultad para estacionar cuesta arriba es evitar que el coche se deslice hacia atrás, es decir, bajando la pendiente. No son pocos los accidentes que se producen porque un vehículo en pendiente cae hacia atrás por inercia y choca al que está detrás.
El uso del freno de mano y de la alineación de las ruedas después de que el coche ha quedado estacionado son los puntos clave para conseguir un estacionamiento adecuado y seguro. Los expertos recomiendan elegir un lugar en el que haya espacio para maniobras. Se debe ubicar el coche frente al lugar que ocupará. Después se avanzará lentamente, girando el volante hacia el lado donde se va a estacionar, hasta que el vehículo quede dentro del espacio.
Una vez que el coche está estacionado, las ruedas deben girarse hacia el lado opuesto de la calzada, es decir, hacia el bordillo. Se activará el freno de mano y se dejará metida la primera marcha, que actuará como freno complementario. Estas medidas de seguridad evitarán que el coche se desplace hacia atrás. Estas estrategias para estacionar un vehículo son aplicables tanto a estacionamientos a la izquierda como a la derecha. La variación está en el giro de las ruedas, que dependerá de la ubicación de la calzada con respecto al vehículo.
Si el coche se estaciona a la izquierda, la calzada quedará a la derecha. Por lo tanto, habrá que girar las ruedas hacia la izquierda. Si se estaciona a la derecha, se girarán hacia la derecha. Es decir, siempre hacia el bordillo.
¿Por qué hay que girar las ruedas una vez que se ha estacionado el coche en una pendiente?
Girar las ruedas al estacionar en pendiente, ya sea cuesta arriba o cuesta abajo, no es un detalle decorativo. Es una medida de seguridad que puede evitar accidentes graves. Las ruedas actuarán como una barrera, como un freno en caso de que el coche se desplace. Es bastante frecuente que el conductor, apurado, olvide activar el freno de mano o lo haga mal.
Si las ruedas están giradas hacia el bordillo, en caso de que el coche comience a deslizarse se bloqueará la caída y se evitará que el coche siga su desplazamiento en la pendiente. Es una medida especialmente recomendable si el coche va a estar estacionado en la pendiente durante varias horas o si la pendiente es muy pronunciada.
¿Qué hacer si el coche es automático?
Es importante tener en cuenta la secuencia de acciones para evitar accidentes en estacionamientos en pendientes si el coche es automático. Una vez que el coche está ubicado, se debe pisar el freno y poner la palanca en posición “N”. Luego se activará el freno de mano, y después la palanca pasará a la posición “P”, de parking.
Consejos esenciales para estacionar en pendiente: no dejar el coche en punto muerto y actuar con calma, no importa si hay otros conductores esperando.
