Finalmente logramos salir de vacaciones, una actividad que cada vez se hace más difícil debido a la situación económica y que requirió toda nuestra atención para que se diera con éxito. Y ello hasta el punto de que se nos olvidó que nuestra ITV caduca en estos días, y ahora nos encontramos a cientos de kilómetros de donde la hacemos habitualmente.
Bien, por un lado no hay de qué preocuparse, en la medida en que podemos realizar la ITV en otra comunidad autónoma y será igualmente válida. Pero si no lo hacemos y decidimos esperar hasta volver a casa, nos estaremos exponiendo a recibir una multa de hasta 500 euros y a que nuestro vehículo tenga que quedarse donde esté, hasta conseguir hacer la ITV.
La Inspección Técnica no tiene fronteras, dentro del país
No importa en qué ciudad o región del país nos encontremos de vacaciones, podemos contactar una estación ITV y, si es posible concertar una cita, no hay ningún problema en realizar la revisión, pues todas las estaciones autorizadas para hacer las inspecciones comparten una base de datos nacional. Ahora bien, si estamos fuera del país y aunque nos encontremos en una nación de la Unión Europea, no hay nada que hacer, excepto volver a España y detener el coche cerca de la estación más próxima, para realizar la inspección antes de que nos multen.
Lo ideal hubiera sido, si sabíamos que el tiempo para hacer la ITV estaba a punto de caducar, haber programado la cita para antes de irnos de viaje. Entre otras cosas, porque podemos hacerla hasta 30 días naturales previos a que se produzca la fecha de caducidad, y eso en nada afecta la fecha de la siguiente inspección.
¿Podemos circular con la ITV caducada?
Definitivamente no, y no hay excepciones. El único día en que podemos circular con la ITV caducada es cuando nos dirigimos de nuestro domicilio a la revisión, sin rodeos. En cuanto a los demás detalles, si somos detenidos con la ITV caducada la multa puede alcanzar los 500 euros, y el coche puede quedar inmovilizado. Una multa de 500 euros puede arruinar las vacaciones a cualquiera.
¿Por qué no solo multarnos y dejarnos seguir? Porque el agente o funcionario que nos detenga puede considerar que el coche no reúne las condiciones mínimas para seguir circulando de forma segura, o porque estamos violando normas ambientales (si el coche está emitiendo demasiadas partículas o humo).
Debemos tener claro que solo hay dos alternativas cuando la fecha de caducidad de la ITV se superpone a la de nuestras vacaciones: anticipar la ITV consiguiendo una cita de urgencia en alguna de las estaciones ITV de nuestra ciudad; o acordar una cita en la ITV más cercana al sitio donde estamos de vacaciones, antes de la fecha de caducidad. Y si ya tenemos la ITV caducada, mover el coche para acudir a la cita, y hacerlo por la ruta más corta.
Importancia de hacer la inspección antes de las vacaciones
Si vamos a usar nuestro vehículo para viajar durante las vacaciones, es importante asegurarse de que el mismo esté en perfectas condiciones y es seguro: motor, frenos, neumáticos, tener la documentación en regla, que funcionen todos los sistemas de seguridad, etc.
Básicamente, son los mismos sistemas que se evalúan cuando se hace la Inspección Técnica de Vehículos, que incluye además otras evaluaciones, por lo que incluso es aconsejable adelantar la ITV y hacerla antes de viajar. De esta manera, si detectan alguna falla o problema, podremos corregirlo antes de irnos, y el coche no nos dará ninguna sorpresa desagradable.