La seguridad nacional es una de las preocupaciones centrales de los gobiernos en todo el mundo. Las diferencias religiosas, políticas y económicas se han convertido en una lucha por el poder y el dominio. La falta de tolerancia y los intereses económicos de naciones y grupos organizados son dos generadores de riesgos permanentes que amenazan la paz y seguridad de los pueblos.
El contexto internacional se ve afectado por el terrorismo, el crimen organizado, los delitos cibernéticos. La movilidad internacional se presenta como un factor que facilita estas violaciones nacionales. Preservar la seguridad sin coartar la libertad de circulación es el gran desafío de este siglo y, probablemente del futuro. El foco para protegerla tiene uno de sus puntos de control en los viajeros.
España impone su sistema para el control de viajeros
La obligación de registrar a las personas que se alojan en establecimientos hoteleros de corta estancia y a los usuarios de empresas de alquiler de vehículos ha generado una intensa polémica. El sistema se ha establecido en el Real Decreto 933/2021. Se trata de la plataforma Ses.Hospedajes, una herramienta creada para el control de uno de los factores que se consideran de riesgo para la seguridad pública: los viajeros y visitantes.
El sistema permite a las autoridades tener la información centralizada sobre los huéspedes alojados en hoteles, hostales, apartamentos turísticos y todo tipo de hospedajes transitorios.
¿Para qué sirve esta plataforma? En la base de datos que genera el Ses.Hospedages el Ministerio del Interior accede a información que favorece la prevención e investigación de delitos de terrorismo, trata de personas, crimen organizado.
¿Cómo funciona el sistema Ses Hospedajes?
El Ses.Hospedajes es un registro digital de personas que se realiza en una plataforma del Ministerio del Interior. Todos los alojamientos turísticos o residenciales que reciben huéspedes y las empresas de alquiler de vehículos tienen la obligación de registrar en la plataforma los datos de sus clientes.
Cuando una persona se registra para hospedarse, el encargado de recibirlo debe tomar sus datos de identificación. Los principales datos solicitados son nombres y apellidos, sexo, DNI, nacionalidad, fecha de nacimiento, lugar de residencia habitual, teléfonos y mail, relación de parentesco entre los alojados juntos.
Estos datos se cargan de forma digital en la plataforma, que está conectada con las bases de datos de los organismos de seguridad del Estado. Por tanto, los datos registrados no se quedan, como antes, en el establecimiento que recibe al huésped. Después de finalizado el registro, se transmiten inmediatamente al Ministerio del Interior. Esa información se integra a la base de datos nacional.
¿Qué hace la policía con los datos que ingresan a sus registros?
La información puede ser consultada en cualquier momento en que se la requiera. Pero hay una posible acción inmediata. Si los datos de algún huésped coinciden con órdenes de búsqueda o perfiles de riesgo, las autoridades pueden intervenir inmediatamente. El análisis de la información permite también que las autoridades observen el tránsito de personas por zonas geográficas. Estas observaciones permiten detectar movimientos anómalos que pueden indicar actividades sospechosas.
Polémicas y rechazo al registro de viajeros
Se ha generado una gran polémica en los distintos sectores sociales. Muchos conocedores del derecho civil advierten que el registro de movimientos de personas roza el abuso y el uso excesivo del control policial. Los hospedajes se quejan porque dicen que supone más trabajo para los empleados y, por tanto, más demoras. Además, consideran que los alojamientos turísticos se han convertido en colaboradores obligados de la policía, función que no les compete.
Pero las autoridades se mantienen firmes en su argumento de que el Ses.Hospedajes es un mecanismo importante para proteger la seguridad nacional. Afirman que el sistema funciona con protocolos estrictos de confidencialidad y dentro de la legalidad.