La era digital está a punto de cobrarse una nueva víctima, o al menos una de las actividades relacionadas con el suministro de gas que más molestias causas entre los usuarios. Se trata de las apariciones en horas inadecuadas de los empleados que realizan la lectura de los contadores de gas.
Aparecen cuando estamos desayunando, cuando estamos a punto de salir a trabajar, o en horas en las que no hay nadie en casa. Pues bien, pronto será otro recuerdo de épocas pasadas, como los afiladores de cuchillos, las botellas de leche y el pan a domicilio, porque los viejos contadores de gas están a punto de ser reemplazados por contadores digitales. Llegan los cambios y las energías renovables.
El proyecto para instalar nuevos contadores de gas
El plan del Ministerio de Transición Ecológica y el Reto Demográfico, MITECO, es reemplazar 8 millones de contadores de gas analógicos por contadores digitales en un plazo de 7 años. De esta manera, en el ministerio creen que se puede llegar a reducir el consumo de gas entre un 1,8% y un 5%, disminuir las emisiones de CO2, mejorar el servicio a los usuarios y ahorrar hasta 800 millones de euros. Esta iniciativa forma parte del Plan Más Seguridad Energética (+SE).
Ya ha comenzado la audiencia pública, para debatir los pros y contras de este proyecto sobre los contadores de gas, y durará hasta el 8 de septiembre, y también existe un cronograma preliminar para el reemplazo de un 80% de los contadores analógicos antes del 2032.
¿Qué hace a un contador de gas inteligente?
Los nuevos contadores digitales permitirán que tanto los usuarios como las empresas puedan leer el contador a distancia, lo que acaba con las visitas del contador, pero también compromete más al usuario con un consumo más consciente y racional del gas. Con este equipo será más difícil cometer fraudes, o al menos eso creen en la Asociación Española del Gas, Sedigas. Además, se podrán realizar cortes del suministro a distancia, cuando haya falta de pago o se requiera para hacer algún trabajo en el piso o en la vivienda.
Para Sedigas, los contadores inteligentes son además un paso necesario que contribuirá a la incorporación en un futuro cercano de gases renovables, como el hidrógeno, como parte del proceso de descarbonización. Hasta ahora, el único argumento en contra de los contadores inteligentes es que costarán mensualmente 0,46 euros más que lo que se paga actualmente por los contadores de gas analógicos, que actualmente es de 0,58 euros.
Cuándo se instalarán los nuevos contadores
El cronograma preliminar de MITECO, todavía sujeto a cambios, para la sustitución de los 8 millones de contadores analógicos, es el siguiente:
- 1,6 millones de contadores, cerca de un 20% de los 8 millones, deberán haber sido reemplazados antes del 31 de diciembre de 2028.
- Otros 2,4 millones más deberán ser reemplazados antes de 2030, para alcanzar un 50%.
- Para 2032, al menos un 80% de los contadores, 6,4 millones, ya deberían haber sido reemplazados.
El plan de sustituciones continuará hasta que solo quede un 2% de contadores analógicos, en los que se justifique que no se puede hacer la sustitución. En este plan se dará prioridad a los puntos de suministros con consumos inferiores a 50.000 kWh. Aquellos locales o viviendas que tengan un consumo superior a los 50.000 kWh deberán contar con un contador digital en un plazo de 5 años una vez que entre en vigor la orden de reemplazo.
Un factor importante por considerar es que en MITECO calculan que un 70% de los actuales contadores de gas analógicos concluirán su vida útil antes de 2028, y antes de 2032 podría ser de un 82%. Esto significa que los contadores tendrán que ser sustituidos obligatoriamente por contadores digitales o por nuevos contadores inteligentes.