Señora directora:
Mi nombre es Rosa María Vegas Hernández, y me dirijo a las autoridades competentes de las que dependen la seguridad de nuestras carreteras.
Expongo a continuación el motivo de esta queja que espero sea tenida en cuenta, por el dolor e incluso muertes que se pueden evitar.
El miércoles día 26 de febrero del 2020, cuando mi hijo se dirigía a su puesto de trabajo, hora 5,30 de la madrugada, en la carretera SG-P-6121, punto kilométrico 0002,750 a la salida de una curva, se encuentra en la calzada cruzando tranquilamente una vaca, inevitablemente colisiona con ella, con la grandísima suerte, para nuestra familia, que ese tremendo golpe sólo ocasiona daños materiales, que podrían haber sido personales, incluso provocar una tragedia irreparable. Allí se personó la Guardia Civil de Tráfico, a los que por cierto, quiero agradecer su amabilidad y profesionalidad, para levantar el atestado.
Ahora, me queda la pregunta que me corroe. Quisiera saber, si las personas responsables de estos accidentes, pueden dormir tranquilas. Como es lógico el primer responsable es el propietario de los animales, ya que como propietario, sería el que tiene la obligación de mantener esos vallados en buenas condiciones, como para animales de la envergadura que allí están(no son ovejas..) y no esos palos medio caídos y esos alambres que no sirven absolutamente para nada ante el empuje de esos animales, los cuales , después de estos accidentes desaparecen misteriosamente. Pero veo más posibles responsables, estos , indirectamente los veo reflejados en los Ayuntamientos, y en los responsables de mantenimientos de las carreteras, bien Diputación o Junta, que no sé a cual pertenece cada una de ellas, ya que todos vemos el estado lamentable en el que están los vallados de las fincas, por llamarlo de alguna manera , y todos lo consienten. Son los que deberían llamar al orden a estas personas. Las consecuencias pueden ser demasiado graves, y si es necesario sancionar, pues se sanciona, hay gente que solo aprende a fuerza de esto.
Me apena pensar, que se tomarán medidas el día que estos sucesos sean irreparables, creo que en la prevención está la idea.
Por lo tanto, insto a los responsables de esto, se pongan manos a la obra, ya que tanto se habla de prevenir accidentes, y sean consecuentes con lo que se predica y que cada uno ponga de su parte para solucionar este grave problema.
Rosa María Vegas Hernández