La selección española afronta hoy ante Venezuela su último partido amistoso antes de la lista definitiva para la Eurocopa en La Rosaleda (Málaga), a beneficio de la Asociación de Futbolistas Españoles, por lo que será un examen para los delanteros y los pretendientes a estar en la cita continental.
Las ausencias de Fernando Torres, en plena sequía goleadora, y David Villa, en el dique seco por lesión, han dejado el ataque sin los habituales referentes ofensivos, por lo que el duelo se presenta como una gran oportunidad para los postulantes a optar a uno de los 23 elegidos para defender el cetro europeo en Polonia y Ucrania.
Así, de los arietes que estuvieron en Sudáfrica 2010 solo está Fernando Llorente, por lo que la cita ante el combinado sudamericano será un buen examen para ver qué pueden aportar jugadores como Roberto Soldado, sobre todo después de que Álvaro Negredo se cayese por lesión.
El valencianista, que últimamente se ha mostrado menos eficaz, es una de las grandes novedades y sobre sus espaldas recaerá la presión de demostrar si las opciones de Torres de tener sitio en la lista definitiva son mayores o menores. Junto a él, aparece la figura de otro sub’21 que da el salto, el mediapunta del Athletic Íker Muniaín, que llega para aportar frescura y espera convertirse en otro ‘bajito’ de referencia.
Con estos mimbres, el conjunto de Vicente del Bosque, intentará superar el récord goleador logrado por Javier Clemente en su época, cifrado en 126 goles, por lo que le bastan dos tantos, aunque el promedio anotador logrado con el salmantino es bastante mayor.
En cuanto al resto de líneas, parece, tras lo visto en el último entrenamiento, que Sergio Ramos jugará de central junto a Piqué y el lateral derecho sería para Andoni Iraola. En el medio, seguramente Xavi descansará, y su lugar lo ocupará Cesc, con Mata y Silva, ambos en buena forma, peleando por acompañar al delantero, que seguramente será Llorente, aunque podría ser que España jugase sin un nueve de referencia.
Además, el partido tiene un cariz especial ya que será el único antes de la lista definitiva para la Eurocopa y se hará ante un rival que no cuenta con excesivo calado, a pesar de su progresión y su brillante actuación en la Copa América, donde acabó cuarta.
El último precedente
Venezuela devuelve la visita ocho meses después de ejercer de anfitrión en Puerto La Cruz ante la campeona del mundo, que se impuso claramente el pasado verano por 0-3 bajo unas condiciones de humedad y calor asfixiantes.
Además, la ‘vinotinto’ llega con el objetivo de cambiar la mala imagen que ha dado en sus últimos amistosos, en los que ha tropezado ante Italia (2-1) e Inglaterra (1-0), y empató en Costa Rica (2-2).
El conjunto de César Farias tiene las bajas de Gabriel Cichero y Andrés Rouga en defensa, y la duda hasta última hora de Fernando Amorebieta, otra de las atracciones de este partido.
Con todo, el combinado afronta el envite para coger mayor confianza de cara a los próximos partidos de clasificación para el Mundial de Brasil del próximo mes frente a Uruguay y Chile, y mantener la tercera posición con los mismos puntos que la selección ‘charrúa’, primera y con un partido menos, y Argentina, segunda.
