Hasta ahora, en cada pleno, Luis Peñalosa, ha contado sus mociones por victorias. Y el ayer no fue una excepción, porque las cuatro iniciativas que presentó el concejal de IU fueron aprobadas. Y las cuatro con el apoyo de los dos grupos mayoritarios. Rehén o no del voto decisivo de Peñalosa para deshacer el equilibrio de fuerzas entre socialistas y populares, el PSOE dio su apoyo a la moción de IU que, en otro contexto político, hubiera sido tumbada sin contemplaciones. Nadie duda que, en contra de su voluntad, el Gobierno municipal ha tenido que asumir la futura retirada de unas farolas fluorescentes , instaladas por la empresa que construyó el aparcamiento subterráneo y que, desde el principio, no disgustaron a los técnicos y responsables municipales por su «toque de modernidad».
Finalmente, el Ayuntamiento retirará los cuatro juegos de farolas fluorescentes, en forma de aspas, ubicadas en la avenida de Padre Claret, de acuerdo con la moción de IU aprobada ayer en el pleno. Peñalosa indicó que su grupo siempre había manifestado su rechazo hacia las luminarias en forma de pirámides fluorescentes que aún permanecían en la avenida, después de que fuesen retiradas un ramillete de farolas altas, por su impacto visual sobre el Acueducto, y sustituidas por otras de menor altura.
El concejal de IU recalcó que las farolas ‘en aspas’ que aún permanecían en la avenida no tienen ninguna utilidad práctica y sí un impacto visual muy negativo. «Dificultan la visión del Acueducto de día y de noche tienen un efecto negativo», dijo Peñalosa, que apuntó, no obstante, que estos elementos podían ser útiles en otras zonas de la ciudad.
«Pobres luminarias de Padre Claret, primero les quitan la cabeza y ahora las patas», bromeó Javier Giráldez (PSOE), que también hizo referencia a la «efímera vida» de las farolas altas y ahora de las fluorescentes. Giráldez propuso que se modificara la redacción del acuerdo de la moción para eliminar la promesa de habilitar una partida específica en el presupuesto de 2012 para las obras de retirada de las farolas piramidales; y que, simplemente, se acordara, literalmente, que el Gobierno municipal asumía el compromiso de retirar las luminarias para trasladarlas a otras zonas más adecuadas de la ciudad.
Jesús Postigo (PP) anunció el voto a favor de su grupo para después recordar como hace siete meses el PP ya presentó una moción en la que, entre otras cosas, se solicitaba la retirada de las farolas y que fue rechazada con el voto de calidad del alcalde y la abstención del concejal de IU. «Hemos perdido siete meses, pero nos alegra que hayan cambiado de criterio porque rectificar es de sabios», dijo Postigo, quien, dirigiéndose a Peñalosa, le reprochó que «quizá le diese vértigo [solo un mes después de acceder a la corporación] el apoyar una moción del PP, a lo mejor le cuesta reconocerlo, pero era una propuesta en interés de esta ciudad».
«Aquella moción no era oportuna», respondió el concejal de IU, quien dejó entrever que entonces pensó que, una vez sustituidas las farolas altas por otras más pequeñas, el Gobierno municipal iba también a retirar a continuación, por su antiestético efecto, las luminarias fluorescentes en forma de aspa.
