La Comisión Europea ha impuesto este miércoles una reducción de tamaño de más del 60% a la banca nacionalizada (Bankia, Catalunya Caixa, Novagalicia Banco y Banco de Valencia) hasta 2017, lo que supondrá recortar a la mitad su red de oficinas.
Esta es la condición que exige Bruselas para autorizar una inyección de capital de 37.000 millones de euros del fondo de rescate de la UE (MEDE) con el fin de garantizar su viabilidad. En concreto, Bankia recibirá 17.960 millones de euros; Cataluña Caixa, 9.080 millones de euros; Novagalicia Banco, 5.425 millones; y Banco de Valencia, 4.500 millones, según se recoge en los planes de reestructuración de las cuatro entidades aprobados por Bruselas.
Además de estos 37.000 millones de euros, el MEDE inyectará un primer tramo de 2.500 millones de euros a la sociedad de gestión de activos inmobiliarios (Sareb), según ha anunciado el vicepresidente de la Comisión y responsable de Competencia, Joaquín Almunia.
Para llevar a cabo su reducción de tamaño, las entidades nacionalizadas deberán centrar su modelo empresarial en préstamos al por menor y préstamos a las pymes en sus principales regiones históricas. Y tendrán que abandonar las líneas de créditos a favor de promociones inmobiliarias y limitarán su presencia en el mercado al por mayor.
En este sentido, Bankia ha anunciado que prevé volver a registrar ganancias en 2013 y espera alcanzar un beneficio neto de 1.200 millones de euros en 2015, tras acometer un plan de reestructuración que supondrá la eliminación de unos 6.000 empleos, el 28% de la plantilla, y el cierre de 1.100 oficinas, con una disminución del 39%.
Así lo ha comunicado la entidad minutos antes de que su presidente, José Ignacio Goirigolzarri, presente estos datos en rueda de prensa. El plan de reestructuración cifra el apoyo público que recibirá la entidad en 17.959 millones de euros, incluidos los 4.500 millones recibidos en diciembre.
Bankia, que registrará unas pérdidas de unos 19.000 millones de euros en 2012, prevé 52.000 millones de nuevo crédito hasta 2015, de los que el 84% se destinará a nuevas empresas. Además, la entidad desinvertirá en negocios no estratégicos, por un importe de 50.000 millones.
En cuanto a la solvencia, el grupo espera acumular un exceso de capital de 5.400 millones sobre el mínimo regulatorio en los próximos tres años. Con el cumplimiento del plan, la rentabilidad sobre recursos propios superará el 10% en 2015.
“Nos espera un camino complicado porque tenemos que realizar grandes esfuerzos. Con la fidelidad de nuestros clientes estamos convencidos de que Bankia va a ser una franquicia sólida, rentable y eficiente pero es muy importante para los siete millones y medio de familias que han confiado en nosotros sus ahorros. Es muy importante para preservar catorce mil quinientos puestos de trabajo y es muy importante para reforzar la imagen del sistema financiero español, que en definitiva es reforzar la imagen de la economía española”, aseveró Goirigolzarri.
Un coste «inferior al 1,5%». El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha afirmado este miércoles que los aproximadamente 40.000 millones de euros del rescate europeo para el sector financiero tendrán un coste «claramente inferior» al 1% que se pagó por las inyecciones del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) decididas por el anterior Gobierno socialista.
Así lo ha puesto de manifiesto durante la Sesión de Control al Gobierno en el Pleno del Congreso, tras ser preguntado por el portavoz económico del PSOE, Valeriano Gómez, por el banco malo y sus condiciones de funcionamiento.
Además, el ministro ha explicado que, tras la aprobación de los planes de reestructuración de las entidades financieras este mismo miércoles, el FROB recibirá los fondos de recapitalización de la UE «a mediados de diciembre».
Suspensión de las cotizaciones. Por su parte, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha suspendido cautelarmente, con efectos inmediatos, la cotización de Bankia y Banco de Valencia en los mercados bursátiles, sin precisar el momento en el que regresará al parqué.
El organismo supervisor de los mercados ha tomado esta decisión al considerar que existen circunstancias que pudieran perturbar el «normal desarrollo» de la cotización de la entidad en los mercados.
La suspensión se produce el mismo día en que la Comisión Europea va a autorizar una inyección de alrededor de 37.000 millones de euros del fondo de rescate (MEDE) a los bancos españoles nacionalizados (Bankia, Catalunya Caixa, Novagalicia Banco y Banco de Valencia) para garantizar su viabilidad.