En julio de 1921, el Regimiento de Caballería «Alcántara 14» escribió una de las páginas más heroicas de la historia del Ejército español en el denominado «desastre de Annual», donde fue prácticamente exterminado mientras cumplía con su misión de proteger al resto de las tropas que huían del ataque masivo e indiscriminado de las cabilas lideradas por Abd-el-Krim. 91 años después de esta gesta, y tras una larga batalla administrativa, el Rey Juan Carlos I impondrá hoy la Cruz Laureada de San Fernando Colectiva a este histórico regimiento, en una ceremonia que dará por finalizado un brillante capítulo de la historia militar española.
Los alumnos de la Academia de Artillería conocieron los detalles históricos, sociales, tácticos y técnicos de este heroico y luctuoso hecho de armas de la mano del coronel jefe del Regimiento Alcántara, Juan Luis Sanz y Calabria, que abrió en el salón de actos del centro de enseñanza militar el ciclo de conferencias complementarias a la actividad académica que tienen lugar a lo largo del curso.
Presentado por el general director de la Academia, Alfredo Sanz y Calabria -hermano del jefe del regimiento-, el coronel realizó ante los alumnos una completa y detallada descripción de las circunstancias sociales e históricas relacionadas con los problemas políticos derivados de la situación española de la época, donde el papel de España en el entonces protectorado de Marruecos se veía amenazado por la presión de potencias europeas que aprovechaban la debilidad de un país con un ejército que aún no se había repuesto de la aún reciente pérdida de las colonias de ultramar.
Juan Luis Sanz y Calabria relató también los hechos ocurridos entre los días 21 a 23 de julio de 1921, en los que el regimiento «cumplió todas las órdenes recibidas desde la escolta y evacuación de heridos hasta la protección del repliegue de las tropas que se retiraban hacia Melilla», lo que no impidió al regimiento incuso combatir contra el enemigo rifeño».
La lápida conmemorativa instalada a la puerta del regimiento recuerda a las víctimas de este hecho histórico, que acabó con la vida de tres jefes, 21 oficiales, cinco suboficiales,11 herradores, 56 cabos, 13 trompetas, 14 soldados de primera y 403 soldados de segunda. En total, 526 muertos, a los que hay que unir los heridos y prisioneros que acabaron prácticamente con el regimiento. Un siglo después, el Regimiento Alcántara es una de las unidades operativas más eficaces de las Fuerzas Armadas españolas, que ha tenido un destacado papel en importantes misiones internacionales en Kosovo o Líbano
