Con pancartas, cacerolas, manifiestos, silbatos y sus gritos los estudiantes de varios institutos de la provincia de Segovia manifestaron ayer su rechazo a los recortes económicos que dañan la calidad de la enseñanza y abogaron por la dignidad de escuela pública.
Entre los participantes en las acciones reivindicativas dominaba vestuario de color verde para así unirse a la “marea verde”, un movimiento de protestas contra la reducción de recursos económicos y humanos en la educación no universitaria que comenzó este curso en la Comunidad de Madrid y se está extendiendo por todas las comunidades entre representantes de los trabajadores y asociaciones de alumnos y de padres.
En la ciudad de Segovia, la plaza del barrio de El Salvador fue el escenario donde se sucedieron las concentraciones de los alumnos de los institutos Mariano Quintanilla y Ezequiel González, pero también hubo actos reivindicativos en la provincia. Concretamente, los alumnos del instituto “Catalina de Lancaster” de Santa María la Real de Nieva se reunieron en el patio a la hora del recreo para dar lectura a un manifiesto y mostrar su rechazo a reformas que perjudiquen la actividad educativa.
En la plaza de El Salvador las movilizaciones también comenzaron a la hora del recreo, cuando profesores y alumnos del IES Ezequiel González alzaron su voz contra la política del tijeretazo. Los compañeros del IES Mariano Quintanilla apoyaron esta acción, y una hora después los del centro Ezequiel González les devolvían el refuerzo. Desde las doce y media de la mañana hasta pasadas las dos de la tarde más de un centenar de jóvenes permaneció reunido ante la iglesia de El Salvador elevando su voz para proclamar : “No a los recortes, no a la reforma laboral”, “Por una escuela pública por y para todos”, “Esta crisis no la pagamos” o “Más calefacción, menos corrupción”. Precisamente, para mostrar los efectos que está generando la reducción de los presupuestos para gastos de los centros, algunos estudiantes portaron mantas evidenciando el frío que pasan en clase.
Aula Antonio Machado
“Tenemos aulas con problemas de calefacción que no se solucionan. En el aula Antonio Machado no se dan clases desde hace quince días porque estamos a 13 grados”, comentó Jorge Bernabé, alumno del Mariano Quintanilla.
En el manifiesto al que se dio lectura, los estudiantes abogan por una educación “igualitaria, gratuita, para todos y de calidad”. “Si queremos una sociedad en la que todos tengamos las mismas posibilidades, necesitamos que todos tengamos las mismas posibilidades de aprender”, manifestaron.
Los estudiantes rechazan, entre otras propuestas: el aumento del número de horas laborales en la mayoría del profesorado; la reducción de la plantilla, con la consiguiente falta de profesores para cubrir desdobles y optativas; prorroga e importante reducción de los presupuestos destinados a los centros educativos: aumento de subvenciones a centros privados; aumento de las tasas académicas en las universidades públicas; y la paralización de obras y reformas en centros educativos.
“La educación es una prioridad —declararon— pero por encima de todo, es un derecho inalienable. Y creemos que todos deberían tener las mismas posibilidades, empezando por poder acceder a una educación de calidad. No dejemos que nos la quiten. Necesitamos que nos enseñen a pensar por nosotros mismos, y a desarrollar nuestra capacidad de juicio crítico”.