El 19,6 por ciento de los camiones y furgonetas controlados durante la campaña específica fueron denunciados. La Dirección General de Tráfico (DGT) desarrolló entre el 14 de febrero y ayer, día 20, una campaña de control de camiones de hasta 3.500 kilos y furgonetas. La campaña se enmarcó en la que realizó la Organización Internacional de Policías de Trafico (TISPOL) en más de 25 países europeos.
Según informa en una nota de prensa la Subdelegación del Gobierno, en total, fueron controlados 669 vehículos, de los que 131 recibieron una denuncia. En la campaña colaboraron las policías locales de Segovia, con 44 controles y dos denuncias; y de Cuéllar, con 24 controles y ninguna denuncia. Por su parte, el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil controló 601 vehículos, de los que 129 fueron controlados. La mayor parte de las denuncias correspondieron a excesos en el peso de la carga; a deficiencias en la documentación del vehículo o del conductor; a deficiencias técnicas del vehículo; a excesos en los tiempos de conducción o en la reducción de los descansos; y a no utilizar el cinturón de seguridad.
Durante la pasada semana, los agentes reforzaron sus controles sobre la documentación, neumáticos, señalización, tiempos de descanso y consumo de alcohol y drogas, entre otros aspectos, de camiones y furgonetas.Según los últimos datos consolidados de los que dispone Tráfico, en 2009 se produjeron 13.403 accidentes con víctimas en los que estuvieron implicados al menos un camión o furgoneta: en ellos murieron 696 personas, 239 de ellas ocupantes de estos vehículos, mientras que las otras 457 viajaban en otros automóviles.
