El periodista Ramón Lobo aseguró que su última novela, ‘Todos Náufragos’, “es una gran catarsis personal”. “Me ha servido para liberarme de una guerra que he mantenido contra mi padre toda mi vida”, relató. Con motivo de la publicación de su libro, el periodista indicó que su nuevo trabajo es también “una aproximación a la historia” de España. Ramón Lobo, nacido en Venezuela en 1955, subrayó en este sentido, que ‘Todos Náufragos’ no pretende ser un libro de historia. “A través de mi familia y el daño causado a mi familia por la Guerra Civil y la dictadura, intento tratar también el daño emocional causado a este país”, afirmó el autor.
De este modo, Lobo hace “un juego constante entre familia y país”, es decir, “la familia sería la historia pequeña y el país sería la historia grande”. “Voy saltando de una historia a otra”, apuntó. El propio autor confesó, asimismo, que la motivación principal por la cual se decidió a escribir esta obra es que ahora está “preparado para perdonar”. En esta línea, Lobo reconoció que si hubiera escrito el libro “hace 10 o 20 años o 30 seguramente hubiera sido un libro de venganza”. “Ahora es un libro en el que trato de ponerme en los zapatos de mi padre. Él era falangista, fue a la División Azul. Tratar de entender porque actuó como actuó y porque me militarizó la infancia. Todavía no llego a la paz, porque quizá sea algo más complicado. Pero sí tengo la sensación de que la guerra ha terminado”, subrayó.
A su juicio, el lector de ‘Todos Náufragos’ puede ser “cualquiera” de su generación, “incluso nietos que puedan haber oído hablar de la guerra o gente que conozca un poco la historia de su familia”. En este sentido, Ramón Lobo defendió que no trata de ser un libro “sectario”, sino “generoso” que “supere un poco la división ideológica”. “Me he llevado sorpresas. Gente que yo había salvado por el hecho de ser republicanos, pues no todos son merecedores de ese salvamento. Y gente que había condenado por el hecho de haber sido de derechas pues… es lo que les tocó vivir”, remachó el también periodista.
Para Lobo, “lo más difícil” del proceso de creación de este libro ha sido enfrentarse a su niñez y a las “carestías” de la misma, así como ir “descubriendo cosas” de sus familiares que no sabía. “No preguntamos a la gente mayor de nuestra familia nunca, y cuando nos llegan las preguntas, ellos ya no están para dar las respuestas”, afirmó. “Revivir esa infancia, el tiempo que perdimos mi padre y yo en peleas”, prosiguió Lobo, al tiempo que concretó que algunos de estos enfrentamientos se debieron a “razones políticas”. “Él se perdió un hijo y yo me perdí un padre”, agregó. Si tuviera que sacar una conclusión del libro, diría que España “necesitaría mirar sobre esa época con más generosidad”.
