El expresidente del Parlamento Europeo José Borrell sostuvo ayer que la propuesta defendida por el actual ministro griego, Yanis Varoufakis, en su pulso con la Unión Europea a costa de la deuda de su país, es “en buena medida razonable”. “Para que puedan pagar lo que deben, la economía griega tiene que crecer —prosiguió el político socialista—, si se ahoga su economía no podrá generar los recursos necesarios, primero para sobrevivir y después para pagar la deuda”.
En una conferencia pronunciada en la Academia de Artillería, incluida en el V Ciclo de Estudios Europeos, el también exministro defendió que “los acreedores de Grecia son los primeros interesados en que Grecia crezca, en que su economía crezca, no en ahogar su economía”. Ahondando en esa misma tesis, el político catalán sostuvo que “los intentos de exigir (a Grecia) cosas imposibles conducen a que al final el país no pueda pagar lo que debe”.
En su intervención, titulada ‘Causas y consecuencias de la crisis del euro’, Borrell habló de “lo que ocurrió para que el euro entrara en crisis” y, sobre todo, “qué hemos hecho para hacer frente a la crisis y lo que nos queda por hacer, que es mucho”.
Ante un auditorio compuesto principalmente por artilleros, aunque también con presencia de civiles, el expresidente del Parlamento Europeo defendió que una salida de Grecia del euro, “sobre todo si fuera una salida forzada”, sería “muy mala para todos”, tanto para los griegos como para el resto de los países, incluyendo Alemania. “Aunque la señora Merkel parece que no consideraría grave ese posible hecho, sí lo es, y mucho”, prosiguió Borrell, quien esperó “por el bien de todos” que finalmente se llegue a un acuerdo, extremo que “posiblemente se consiga”, si bien sería “un acuerdo de última hora, como siempre pasa en Europa”.
En referencia a la posición que mantiene el Gobierno de España, prefirió no pronunciarse, por falta de conocimiento de la misma, si bien deseó que los representantes españoles “contribuyan a que se alcance un acuerdo”.
Preguntado sobre quién deberá ceder más en las negociaciones, si la Unión Europea o Grecia, respondió que “todos un poco, como siempre”. Borrell reconoció que, ayer, era patente “una cierta confusión semántica” entre las dos partes, que discutían sobre la posible prórroga del pago de la deuda. “Lo que está claro —continuó diciendo— es que Grecia pide que se le dé un corto plazo de tiempo para renegociar, pues lo que quiere es implantar un modelo que permita crecer al país”.
Aunque los periodistas le preguntaron por su opinión sobre la situación que atraviesa el PSOE, Borrell evitó responder. Ante la insistencia de los informadores, reconoció que lo vivido por la Federación Socialista Madrileña en los últimos días le hacía “recordar algunas experiencias”. En 1998, el político catalán ganó las elecciones primarias para la elección de candidato a la Presidencia del Gobierno, pero finalmente dimitió antes de que llegarán los comicios, en 2000, por disputas internas en el seno del partido.
Tampoco quiso comentar el actual momento político de Cataluña. “Hoy no toca, como diría Puyol”, se limitó a manifestar.
