Finalmente, las cuatro empresas de viajeros que operan desde la estación de autobuses de Segovia, con concesiones de transporte interurbano, despacharán billetes desde el próximo lunes, 7 de septiembre, en locales del paseo de Ezequiel González colindantes con la terminal y situados junto al espacio que se habilitará para que los autobuses recojan y dejen a los usuarios.
Tres de ellas, La Sepulvedana —que ya informó el miércoles del cambio—, Linecar y Garrido, compartirán un local municipal situado en el bajo de la estación pero con acceso desde Ezequiel González. Se trata de un espacio relativamente amplio que acogió hasta su cierre una franquicia de droguería.
La alcaldesa, Clara Luquero, informó ayer de que, al tratarse de un espacio del municipio, las operadoras abonarán un alquiler durante el tiempo de utilización del local.
“El Ayuntamiento ha intentado encontrar una solución, porque el despacho de billetes es una cuestión de los operadores y de la Junta de Castilla y León que tiene las competencias de transporte; estamos intentando que se ubiquen en el local más próximo a donde estarán los autobuses y además tiene acceso desde la calle y no está afectado por las obras”, comentó Luquero, quien puntualizó que desde el departamento municipal de Contratación se estaba estudiando la vía más adecuada para el alquiler del mismo para tramitarlo de urgencia por un tiempo determinado, con posibles prórrogas.
Por otro lado, Bermejo, la cuarta operadora de transporte de viajeros con taquilla en la estación de autobuses informa a los usuarios, a través de un cartel, que el despacho de billetes pasará a realizarse desde el lunes en la oficina de una agencia de viajes situada también en el paseo de Ezequiel González.
Aunque hoy viernes es posible que la empresa adjudicataria y técnicos municipales comiencen a planificar sobre el terreno la retirada de la marquesina sujeta al edificio, el cierre de las instalaciones no será definitivo hasta el sábado o el domingo, ya que las obras en sí no comenzarán, previsiblemente, hasta la mañana del día 7.
Fuentes municipales sí indicaron que durante el fin de semana, teniendo en cuenta que el domingo no es laborable, se comenzará a trasladar vallas y material a la terminal de autobuses.
El plazo de ejecución de las obras es de dos meses y la alcaldesa dijo ayer que “lo más probable es que, a su término, se reabra, hasta el inicio de las obras de reforma de la estación, cuya tramitación se prolongará todavía en torno a cinco o seis meses, según la estimación que hace Luquero.
